He de reconocer que el sillón de tirada limitada que ha diseñado Igor Chak quedaría de fábula en mi salón, pero es una pena que no disponga de los 5.000 dólares que vale. Según su autor está hecho a base de piel y foam y ha intentado además de basarse en el mítico juego Space Invaders, darle un toque retro al crearlo con estilo pixel.
Sea como sea, siempre nos quedará la duda de saber si es cómodo o no.