Bully, aquel juego que tanta polémica levantó y que, supuestamente, fomentaba el maltrato escolar y los abusos entre compañeros, podría volver de la mano de sus creadores a pesar de todos los problemas que ocasionó dicho título en el pasado. Los chicos de Rockstar se están planteando seriamente retomar la franquicia y, según algunas fuentes cercanas a la compañía, el desarrollo del juego estaría a día de hoy muy avanzado de no ser por Max Payne.
Todo hace indicar que dicho desarrollo podría comenzar en marzo del año que viene, una vez Max Payne 3 llegue al mercado. Según Dan Houser, director creativo de Rockstar: “Una vez terminemos con Max, veremos qué hacer con Bully“