Como suele ser habitual, cada trimestre fiscal se hacen públicos los datos de las tres grandes compañías de videojuegos (Microsoft, Nintendo y Sony), siendo Sony la última en hacerlos públicos y la que ha creado más controversia al ocultar el desglose a sus accionistas. Por todos es sabido que estamos en tiempos de crisis y que las ventas de todas las consolas han disminuido, aunque esto no ha logrado que la división de entretenimiento de Microsoft tenga unas ganancias del 20% respecto al año anterior o que Nintendo esté salvando sus altibajos financieros con la salida al mercado de la N3DS y ahora la N3DS XL. Pero en el caso de Sony, la empresa ha tenido unas pérdidas de 36 millones de dólares, o lo que es lo mismo, el 14,5% respecto al año anterior.
Por si esto no estaría poniendo incómodos a los accionistas, Sony no ha revelado las ventas de PS Vita, y las ha juntado con las de PSP; e incluso cuando los accionistas les han preguntado por dichas ventas, Sony se ha negado a mostrárselas de forma individual. De forma combinada, PSP y PS Vita han vendido 1,4 millones de consolas, frente a que el año pasado, solo PSP ya vendió 1,8 millones. Estos datos y la falta de marketing que ha tenido la nueva consola portatil de Sony nos hacen temer que nos encontremos ante otro fracaso de la compañía, ya que el hecho de ocultar los datos individuales solo creará mayor desconfianza entre sus accionistas y que las desarrolladoras dejen de apoyar dicho proyecto por la escasez de ventas.
Por otra parte, tampoco sabemos los datos exactos de ventas de PS3, ya que los han dicho también de forma combinada junto a los de PS2, los cuales han vendido 2,8 millones frente a los 3,2 millones del año anterior.
¿Se pondrá Sony las “pilas” y hará que se eleven las ventas de su portatil con ofertas y descuentos o decidirá dejarla de lado? Esperemos que sean sabios y no desaprovechen una consola con tanto potencial.
