Ya ha llegado el E3, otro año de novedades en el mundo del videojuego condensadas en 3 días, aunque en realidad solo dos, pues hoy día 10 podemos disfrutar de Microsoft, EA, Ubisoft, mientras que mañana tendremos a Sony y Nintendo.
La que hoy nos trae aquí es Xbox One, de Microsoft, una conferencia LLENA de juegos, tráilers y novedades alucinantes. La verdad que este año han sorprendido con una conferencia sin apenas otra cosa que no sean juegos… incluso solo han presentado una novedad en fuera de lo jugable, la interacción con otros usuarios, poder ver partidas en streaming, subirlas a la nube o comparar las estadísticas de los juegos con amigos. Además, infinidad de amigos, ya no está limitado a los 100.
Los juegos han sido los grandes protagonistas y desde el principio lo han querido dejar claro, con un espectacular tráiler/demo de Metal Gear V, The Phantom Pain. Espectacular es poco y no hay suficientes palabras para describir lo que se avecina de la mano de Kojima productions…
Después han mostrado algo del nuevo Kinect Sports y el World of Tanks, nada demasiado destacable la verdad… hasta que han anunciado la nueva Xbox 360 más pequeña.
Acto seguido se ha dejado ver el tráiler y la demo jugable de Ryse: Son of Rome, bastante interesante y con posibilidades. Del mismo estilo también hemos podido disfrutar del tráiler de Dark Souls II, esperado juego para los fans de la primera entrega.
Aplausos, gritos y vítores se han escuchado en cuanto se ha anunciado el nuevo Killer Instinct, con gráficos mejorados y totalmente renovado.
Sunset Overdrive, Minecraft y Forza 5 han sigo los juegos que han seguido, bastante original el primer (de matar zombies) y más de lo mismo con los otros dos.
El que nos ha encantado y nos ha dejado con la boca abierta ha sido Quantum Break, del cual solo hemos podido disfrutar de un vídeo CGI, aunque muy prometedor.
DeadRising 3, Halo ¿5? y TitanFall son los juegos con los que ha terminado la conferencia y con los que nos han dejado con la boca abierta… así que mejor os dejo los vídeos y no os digo más. Microsoft se ha superado este año y ha concedido lo que tantos años hemos pedido, una conferencia centrada en videojuegos.
