Escribir sobre ‘Jurassic Park‘ (‘Parque Jurásico’ por estos lares) es escribir sobre la que quizás fue la película más importante de la última década del siglo XX y sobre uno de los films más taquilleros de la historia del cine. Alcanzar casi los mil millones de dólares de recaudación mundial en una época en la que aún no existía la publicidad gratuita que los usuarios de internet regalamos a los grandes estudios de cine y en un momento en el que el 3D no incrementaba artificialmente el mérito en taquilla de una película, es algo que hoy sería imposible para la mayoría de las producciones actuales. En la tesitura cinematográfica que se vivía en 1993, año de estreno del film, tan solo triunfaban (salvo honrosas excepciones) los largometrajes que lucían un nombre muy reconocible como director o cabeza de cartel y las que su calidad las convertía en obras muy recomendables entre nuestros allegados (el famoso boca-oreja). Y ‘Jurassic Park’ podía presumir de ambas virtudes.
Dirigida por Steven Spielberg (considerado en aquella época el Rey Midas de Hollywood, debido a su don de convertir en oro para la taquilla todo proyecto en el que su nombre se veía involucrado), ‘Parque Jurásico’ es la adaptación a la gran pantalla del best-seller homónimo del malogrado autor Michael Crichton (quien junto al guionista David Koepp y una pequeña aportación de la libretista Malia Scotch Marmo se encargó de adaptar para Spielberg su propia obra). Batiendo todo tipo de récords el año de su estreno y logrando sumergir a la mitad del planeta en una auténtica “Dino-manía”, el film cosechó un éxito sin parangón en todos los países donde fue estrenado y dividió a la crítica especializada en cuanto a la calidad fílmica que poseía. Sin embargo, hoy en día se la considera la última gran película de aventuras de Steven Spielberg y goza de un gran respeto y admiración tanto de las audiencias generales como de los críticos cinematográficos; que incluso aseguran que la adaptación fílmica es inmensamente superior a su original literario (que aporta demasiados datos innecesarios para alargar la trama de una manera artificiosa e irregular).
Con motivo del veinte aniversario desde su estreno, Universal Pictures ha decidido ofrecernos una visión de Jurassic Park novedosa para todos nosotros; la posibilidad de revisitar la Isla Nublar (sede del parque temático que da nombre a la película) a través de la perspectiva que nos da el omnipresente sistema 3D. Y el resultado no podía ser mejor. ‘Parque Jurasico 3D’ debe considerarse la versión definitiva de la obra, y para demostrar que la adaptación 3D ha gustado tenemos las cifras de su reestreno en USA , donde se ha alzado con unos estupendos 45 millones de dólares.
Si bien la película no fue rodada en 3D (obviamente) ni pensada su producción para posteriormente ser reconvertida a ese formato, la experiencia tridimensional es tan satisfactoria que a uno le lleva a plantearse una peliaguda cuestión: ¿cómo es posible que producciones actuales, muchas de ellas incluso rodadas en genuinas 3D, no aporten nada a la obra y quede con ello patente que el único motivo de la inclusión del formato en dichos films es el de engordar el precio de la entrada? Por contra, ‘Jurassic Park 3D‘ nos ofrece una maravillosa sensación de realismo en cada una de sus escenas gracias a una inteligente implantación del sistema tridimensional, que nos brinda unos planos con un nivel de profundidad tan logrado (sobre todo en las escenas en exteriores) que nos harán creer por un momento que somos uno de los privilegiados invitados (a la postre víctimas) de la visita inaugural al parque que da pie al desarrollo de la trama. El espectador no debe caer en el error de que la conversión le ofrecerá secuencias de “pop-ups” (objetos que sobresalen de la pantalla), pues para ello hubiera sido necesaria una completa remodelación de los efectos visuales de la película (algo que para mi asombro se demandaba en algunos foros norteamericanos), siendo un trabajo totalmente innecesario dado que los FX del film, tanto los digitales obra de Industrial Light & Magic como los animatrónicos creados por el mítico Stan Winston, eran tan punteros para la época que hoy en día siguen resultando completamente creíbles en su mayoría.
Con toda la espectacularidad que el nuevo formato pueda ofrecer a la obra (la secuencia en la que los protagonistas llegan en helicóptero a la isla mientras suena el magnífico main-theme del maestro John Williams, goza en esta versión 3D de una renovada y asombrosa belleza), el punto fuerte de este reestreno de ‘Parque Jurásico’ no es otro que la nueva oportunidad para disfrutar en cines de uno de los máximos exponentes del género de aventuras (aventuras aderezadas con unas gotas del cine de terror que Spielberg demostró dominar con ‘Tiburón’) pues por mucho buen proyector y led de gran pulgada que tengáis en el salón, nada puede sustituir a la experiencia de disfrutar de la proyección en un sala cinematográfica del que es ya sin duda uno de los grandes clásicos del cine.
Aprovechad esta oportunidad que Universal Pictures nos ofrece para visitar ‘Jurassic Park’ de la mejor manera posible. O para volver a visitarlo si ya tenéis algunos añitos encima, o podéis hacer como yo: intentar quedar con aquellos amigos con los que la visteis en el momento de su estreno original para rememorar viejos y mejores tiempos. Merecerá la pena. Seguro.
Escrito por Adolfo Saro
