¿Quién no conoce al increíble Hulk? Ya sea por los cómics, la serie de Bill Bixby y Lou Ferrigno, los dibujos animados, la película que protagonizó Eric Bana o las interpretaciones hechas por Edward Norton y Mark Ruffalo, el coloso esmeralda nunca ha carecido de popularidad, como ya dejé aclarado en este artículo. Pero, ¿qué sabemos sobre este extraño personaje?
En este enlace podréis acceder a un análisis detallado de este peculiar héroe escrito por Adrián Laguna. Sin embargo, no está de más aclarar que su primera aparición, gracias a los guiones de Stan Lee y los dibujos de Jack Kirby, fue en el cómic ‘The incredible Hulk‘ nº 1, fechado en mayo de 1962, que su poder (¿o debería decir su maldición?) es fruto de la radiación gamma, que su color original era el gris, que sus primeras transformaciones sólo sucedían por la noche y que está innegablemente inspirado en ‘El extraño caso del doctor Jekyll y Mister Hyde’, de Robert Louis Stevenson.
En esta ocasión centraremos nuestra atención en la película ‘El increíble Hulk‘, un largometraje de menos de dos horas de duración, que está dirigido por Louis Leterrier y protagonizado por Edward Norton. El resto del reparto principal está compuesto por Liv Tyler (que interpreta a Betty Ross), Tim Roth (que da vida a Emil Blonsky quien, como todo aficionado a los cómics sabe, acaba por convertirse en la monstruosa Abominación) y William Hurt (como el general Thaddeus ‘Trueno’ Ross). Cabe destacar que el actor que pone la voz a Hulk no es otro que Lou Ferrigno (quien, al igual que Stan Lee, realiza un cameo en la película). Otra breve aparición a tener en cuenta es la que hace Robert Downey Jr. en la escena final del film como Tony Stark (la cual, inexplicablemente, se emitió antes de los créditos finales y no después). Este largometraje, estrenado en 2008 fue el segundo que se rodó como parte del Universo Cinematográfico de Marvel (después de ‘Iron Man’, que vio la luz el mismo año) para allanar el camino a la película de ‘Los Vengadores‘ (2012).
Al contrario que el poco exitoso film protagonizado por Eric Bana en 2003, esta vez no se nos vuelve a contar el origen del personaje desde el principio, sino que, por medio de breves escenas mostradas en los créditos iniciales, se nos ofrece un resumen de cómo el doctor Banner, al tratar de recrear el suero del supersoldado, sufrió un accidente que le hizo transformarse en un ser verde y furioso cada vez que perdía los estribos. Perseguido por los militares, que se encuentran encabezados por el general Ross, el protagonista se vio obligado a convertirse en un fugitivo y abandonar a su novia que, por desgracia, se trataba de Betty, la hija de su principal enemigo.
Tras esta introducción, la película comienza en Brasil, lugar en el que el doctor Banner se encuentra escondido mientras trata de controlar a su monstruo interior y, bajo el seudónimo del Señor Verde, se comunica por e-mail con un tal Señor Azul, que pretende ayudarle a volver a la normalidad.
Pero, como era de esperar, los militares acaban por localizar a Banner. Así comienza una nueva persecución en la que Betty Ross acaba por verse involucrada (y no duda en ponerse de parte de su antiguo novio). Sin embargo, cuando el protagonista es finalmente capturado, el general Ross se ve obligado a soltarlo, ya que él es el único que puede detener a la Abominación, una grotesca criatura en la que se ha transformado el soldado Emil Blonsky tras someterse voluntariamente a un experimento con la sangre irradiada de Banner, gracias a la ayuda forzada del doctor Samuel Stern , que era la auténtica identidad del Señor Azul (al que interpreta el actor Tim Blake Nelson).
Como es lógico, los dos monstros principales y su brutal pelea están realizados a base de ordenador. Afortunadamente, al contrario de lo que sucede en otras películas, los efectos especiales están bien diseñados y no desentonan más de lo prudente. Parte del mérito se lo lleva el no hacer un uso excesivo de ellos, ya que, como todo el mundo sabe, los largometrajes del coloso esmeralda siempre se muestran más interesados en explorar el factor humano del protagonista que en su faceta de monstruo.
La película está plagada de guiños a la serie de 1977, empezando por la ya mencionada colaboración de Lou Ferrigno, de modo que los fans del Hulk setentero pueden disfrutar mientras descubren el resto de las referencias: la máquina a la que se somete el protagonista para recrear el suero del supersoldado es muy similar a la utilizada por el doctor Banner en la serie, Bill Bixby aparece brevemente en la televisión cuando Edward Norton está haciendo zapping, la música lenta que se pudo escuchar en los setenteros episodios también está presente aquí y, por último, vemos hacer una breve aparición a un tal Jack McGee, personaje que es un claro guiño al periodista homónimo que interpretó Jack Colvin durante toda la serie. Otro detalle que se puede destacar, aunque esta vez con referencia a los cómics, es cuando Betty le entrega a Bruce unos pantalones de color púrpura, que es la tonalidad original de dicha prenda en los tebeos.
Si tenemos que la película se rodó para que formara parte del Universo Cinematográfico de Marvel, todo el mundo ya imaginaba que Edward Norton se convertiría en el doctor Banner definitivo. No obstante, parece ser que el actor se extralimitó a la hora de interpretar el papel y se empeñó en rodar escenas que no estaban en el guión original, sólo porque a él le parecía que quedaban bien. Como era de esperar, ninguna de aquellas secuencias apareció en el producto final, lo cual enfadó mucho a Norton (aunque ignoramos si se volvió verde o no), que se negó a promocionar la película, lo que llevó a su expulsión de la franquicia y a su sustitución por Mark Ruffalo.
Mientras que Iron Man, Thor y el Capitán América ya llevan tres aventuras en solitario, sólo hemos podido volver a disfrutar del coloso esmeralda en ‘Los Vengadores‘ (2012) y ‘Vengadores: La era de Ultrón‘ (estrenada este mismo año). Aunque parece que, actualmente, existe un problema de derechos legales para grabar una nueva película de Hulk, todo el mundo da por hecho que el cambio de actor fue uno de los motivos por el que se ralentizó el plan de rodaje de una secuela, para desgracia de los fans que están deseando disfrutar de una nueva aventura en solitario del más exitoso miembro del grupo de héroes en la dos entregas cinematográficas. De llegar a rodarse otro film, son tres las opciones más deseadas por el público: ‘Planeta Hulk‘, ‘World War Hulk‘ (que, lógicamente, debería ser una continuación de la citada anteriormente) y una aventura en la que el coloso esmeralda se enfrente al Líder, ya que la película de Edward Norton dejaba al doctor Samuel Stern en dicha tesitura. Aunque esta tercera opción es mi favorita (para dejar atado el cabo suelto), parece ser que Marvel Studios se llegó a plantear la adaptación al cine de ‘Planeta Hulk‘. Sin embargo, el coste que conllevaría el largometraje es demasiado elevado para que, por el momento, se arriesguen a realizarla sin estar seguros de que sea un éxito de taquilla.
En definitiva, pese al cambio de actor, esta película resulta imprescindible para poder establecer una lógica en la línea argumental del Universo Cinematográfico de Marvel, además de tratarse de un film bastante entretenido.
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