miércoles, abril 24, 2024

Crítica de ‘Pesadillas’

Cuando las 'Pesadillas' se convierten en una comedia sostenida, casi en exclusiva, por Jack Black

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Panini

pesadillas

Quien más y quien menos, todos hemos visto alguna vez la serie ‘Pesadillas‘ o hemos leído una de las novelas juveniles en las que estaba basada, que tenía como peculiaridad que podías escoger tu propia aventura. Esta saga, terrorífica para una generación de niños y adolescentes que aprendieron lo que era el miedo a través de hombres lobo y momias –lo que también aportaba cierto grado de cultura mitológica que era de agradecer– ve, en ‘Pesadillas’ (‘Goosebumps’ en su título original) una adaptación completamente alocada y con mucho más humor que pavor.

Con un reparto encabezado por Jack Black como el mismísimo Robert Lawrence Stine –autor de todas estas novelas–, la película promete, desde los carteles de propaganda, ser una divertida aventura familiar con algún que otro susto. Y lo último no lo cumple.

Nada de pasar un extraño miedo psicológico como cuando veíais al perro en el porche iluminársele los ojos. Lo cierto es que podrían haber aprovechado estos libros para hacer algo mucho más pretencioso como una saga de películas a lo Universo Cinematográfico Marvel. Pero, más que a las obras, esta película es un homenaje tanto al autor como a su trayectoria, y una muestra de ello es que recurre a unir a prácticamente todos los seres horrendos que inventó en su día en una especie de revuelta de lo más histriónica.

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Desde el principio de la película se observa un argumento de lo más casposo. Zach Cooper –interpretado poco más que correctamente por Dylan Minnette– es un chaval que se muda al pueblo de Greendale, después de haber estado toda su infancia viviendo en Nueva York. Este cambio de vida a lo ‘Crepúsculo’ viene con sus dosis ambientales, sus lluvias y sus movidas.

Por supuesto, también viene con una chica preciosa que ¡oh, casualidad! es su vecina, Hannah –a quien interpreta la que bien podría ser una Chica Disney Odeya Rush–. Y, para completar el trío típico de dos chicos y una chica en el que uno es el aguantavelas, tenemos al amiguísimo de la muerte Champ –encarnado por Ryan Lee, de lo mejorcito del reparto y a quien ya pudimos ver en ‘Super 8’–.

El nudo de la trama inicia cuando Zach descubre que el padre de su vecina es nada más ni nada menos que ¡Jack Black! digo… Robert Lawrence Stine. Haciendo del vecino antipático que te mira con mala cara en los trayectos de ascensor, pronto se descubre que este genuino escritor guarda muchísimos secretos tras esas novelas “juveniles”.

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Y ahora es cuando viene el ‘Jumanji’- Sí, no lo consideréis spoiler porque ya sale en el tráiler. Pero, ¡oh, genialidad! Las criaturas inventadas por Stine salen de los libros para ponérselo difícil a los protagonistas, que deberán devolverlas a su estado original. Por supuesto, algunas son buenas, otras muy cabronas y otras simplemente sirven como cameos para echarse una risita puntual o marcarse un Jar Jar Binks en toda regla.

Menos mal que Black sigue siendo el mismo que el de ‘School of Rock’ o ‘Tenacious D: Dando la nota’, porque la película tiene poco sustento y, de no ser por él, no se aguantaría por ninguna otra pieza. Pero, si quitamos las eventualidades y la observamos con mirada melancólica, se nos encogerá el corazón ante la pelea dialéctica de Stine y el mismísimo Stephen King o los pequeños cameos de personajes que pudieron –o no– marcar gran parte de nuestra más tierna infancia.

Lo mejor que consigue el director Rob Letterman, no obstante, es encajar tantos personajes secundarios de manera tan directa –y nada sobrecargada–, haciéndoles partícipes de algunos de los mejores momentos de la película. Este es el caso de Amy Ryan, quien después de estar nominada a un Oscar se ve relegada a papeles bastante más humildes, o de Amanda Lund o Thimothy Simons, que interpretan a una pareja de policías mucho más conseguida que la de ‘Ocho Apellidos Catalanes’.

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Otro de los puntos destacados son los efectos. Lo cierto es que saben aprovechar tanto el CGI como el maquillaje en cada uno de los personajes y consiguen resultados espectaculares sin llegar a la artificialidad. Y todo ello, por supuestísimo, enmarcado en una banda sonora de uno de los mejores compositores de todos los tiempos y, sin duda, el mejor que podrían haber encontrado para este film: Danny Elfman.

Por patético que sea el momento, la música consigue aportar una emoción concreta que llega hasta cualquier tipo de público, y en este caso es un acierto tremendo ya que son estos pequeños detalles los que la salvan de su soporífero argumento. Ojo, no tanto así ocurre con su guion; los diálogos están muy bien cogidos y los cameos y homenajes aparecen por doquier, gran trabajo de Darren Lemke al respecto.

En definitiva, se trata de una película para pasar la tarde con muchas cosas buenas –Jack Black, la banda sonora, Jack Black, los personajes secundarios, Jack Black, el guion bien desarrollado y… ¿he dicho ya Jack Black?– pero dentro de una historia que nada tiene que aportar al mundo del cine y con la que se podrían haber hecho maravillas que quedan, en este caso, en una comedia para chavales sin ningún tipo de pretensión extra.

[note]

Goosebumps (Pesadillas en España y Escalofríos en Hispanoamérica) es una película estadounidense de 2015, dirigida por Rob Letterman y escrita por Darren Lemke. La película está protagonizada por Jack Black, Dylan Minnette, Odeya Rush, Ryan Lee, Amy Ryan, Jillian Bell y Halston Sage. Está basada en la serie de libros de terror para niños Goosebumps, creados por R. L. Stine, quien también participa en la película.

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CRÍTICA

Poco más que correcto

RESUMEN

Comedia a ratos divertida y a ratos insoportable solo sostenida por Jack Black. Cumple con el afán de hacer un homenaje pero no pasa de eso.

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Comedia a ratos divertida y a ratos insoportable solo sostenida por Jack Black. Cumple con el afán de hacer un homenaje pero no pasa de eso.Crítica de 'Pesadillas'