miércoles, abril 24, 2024

Los Druidas: El Misterio de los Ogams

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Panini

Hoy os propongo un viaje a un tiempo envuelto en la bruma de la leyenda. Época de cambios, que significó la ruptura con el mundo antiguo y se establecían nuevos paradigmas que servirían de rumbo a la cultura occidental durante los siglos venideros. Los Druidas, de Jean-Luc Istin y Jacques Lamontagne, nos lleva al siglo V, para ser testigos de los últimos estertores de las tradiciones celtas, anuladas por la llegada del cristianismo y su confrontación con todas esas creencias que se consideraban herejía. Aunque el viaje que nos proponen estos autores está muy lejos de ser un panfleto acusador o partidario; se acerca más al relato de aventuras, enmarcadas en un fabuloso contexto histórico, en el que prima la reflexión acerca del choque de culturas y los puntos que unen en lugar de separar. La convivencia entre lo nuevo y lo viejo, las diferencias entre fe y fanatismo o el valor de la herencia cultural para entender lo que somos.

El tomo de Yermo
El tomo de Yermo

Los Druidas se enmarca dentro de las narraciones de misterio, aderezado con toques de aventura, que cuenta el viaje del druida Gwenc´hlan, auténtica leyenda entre los suyos, obligado por las circunstancias a ayudar a sus jurados enemigos, los monjes cristianos, a resolver unos misteriosos asesinatos. Las pistas apuntan directamente a los druidas y sus rituales , pero todos los implicados sospechan de una conspiración que quiere enfrentar a ambas creencias de manera violenta y definitiva. Las antiguas leyendas celtas tienen las claves para entender los crímenes, que ponen en peligro la frágil paz entre ambas tradiciones religiosas.

Aunque la propuesta de estos autores se enmarca dentro de un contexto histórico tan concreto, lo cierto es que la historia, como tal, es una excusa para la zambullida total en el mundo fantástico de las tradiciones mágicas de tan legendarios personajes, los druidas. Se han escrito ríos de tinta acerca de los celtas, un pueblo sobre el que se sabe lo justo y se desconoce casi todo. A pesar de este detalle, esas lagunas acerca de su origen y tradiciones son el punto de partida propicio para la imaginación. No hay ninguna duda de que estos sacerdotes de los bosques despiertan el interés de los lectores, y es que no es la primera vez que se asoman por las viñetas. Todos tenemos en la mente a Panoramix, el simpático y sabio consejero místico de la aldea de Asterix y demás irreductibles galos. Esa versión dulcificada de esta religión tan fascinante como terrible (tan parecida a esa naturaleza que servía de inspiración) fue para muchos (entre los que me incluyo) el primer contacto con estos personajes. La obra que hoy os presentamos deja de lado las simplificaciones, y se adentra sin complejos en el mundo mágico de tierras perdidas en la niebla y seres que habitan más allá del plano mortal. Para dar credibilidad a la construcción de este pueblo mítico, el guionista, Istin, se ha apoyado en la colaboración con Thierry Jigourel, experto y estudioso del mundo celta. Los conocimientos de Jigourel aportan luz sobre el folclore y tradiciones religiosas de los druidas, así que el relato se mueve con audacia entre la realidad histórica y la leyenda.

La magia de los druidas
La magia de los druidas

Los autores han decidido, con intenciones de construir un cómic en el que prime la diversión, dejar de lado las certezas históricas. Abrazan sin muchas excusas la perspectiva mágica de los protagonistas, y es normal que visitemos el mundo onírico de los seres que pueblan las tradiciones celtas. La magia es real y palpable en la realidad que describen, a pesar del aura de realismo que forma parte de los pilares del relato. Ese choque entre el universo legendario y la realidad cambiante del siglo V es el principio del viaje de Gwenc´hlan, último defensor de una fe moribunda.

En la aventura, el sabio druida se hace acompañar del joven Taran, su aprendiz, representante del futuro, aunque pronto averiguaremos que la vida ha dado muchas vuelta para el joven. Un anciano Taran es el encargado de contarnos las peripecias de estos detectives medievales, y, aunque no nos revelan todos los secretos, el lector puede construir en su mente gran parte de lo que ha pasado en esos años perdidos.

El dibujo de Lamontagne es, sencillamente, espectacular. Aunque la composición de página no se caracteriza por su audacia, el contenido de cada viñeta es un regalo para los ojos. Los aficionados al estilo francés puro y duro encontrarán en este trabajo todo un lujo de detalles y construcción de ambientes, que se mueve con facilidad aplastante en las líneas más clásicas, sin perder la perspectiva de un cómic del siglo XXI. Quizá es el colmo del riesgo, pero a cambio tenemos en nuestras manos el arte preciosista de un dibujante al servicio del relato. El uso de la luz no es sólo un ejercicio de belleza plástica; sirve para el movimiento entre mundos, entre la oscuridad de los monasterios a las brillantes ciudades de las leyendas. El arte de Lamontagne es hermoso, apropiado, lleno de intención en cada línea. El diseño de personajes, el trabajo con las emociones en los primeros planos y la perfecta integración de la figura en la escena tienen un nivel de perfección de esos que hacen afición. Atención a las portadas, que son para hacerse un póster.

Los misterios de un mundo desaparecido
Los misterios de un mundo desaparecido

Lo que empieza como un misterio clásico de policíaco, se transforma a cada paso en la búsqueda del legado ancestral de los celtas y sus objetos mágicos. Aventura medieval con toques de El Nombre de la Rosa, que evita los abismos del relato histórico puro y ofrece una versión intencionada da la época representada. Los ratones de biblioteca puede que se pongan muy nerviosos con las licencias de los creadores, pero las intenciones están muy lejos de dar lecciones de historia, lejos de crear polémicas o de juzgar a base de clichés.

Un tomo para amantes del cómic, en general, gracias al trabajo de Jacques Lamontagne, que hace más grande un relato que pedía a gritos un artista de esa categoría.

Los Druidas recopila en un tomo único las tres entregas que compusieron la edición francesa. Como siempre, Yermo hace gala de un gran gusto a la hora de plantear su edición, y es todo un lujo en cartoné. En excelente calidad de papel, os esperan 144 páginas a todo color que encontrarás en tu librería favorita al precio de 34 euros.

[note]

En el siglo V, el mundo está cambiando y empieza un conflicto entre el cristianimo y las antiguas religiones druídicas en la isla de Bretaña. Tras la muerte y la mutilación de algunos monjes, el druida Gwenc’hlan y Taran, su aprendiz, se enfrentarán a una amenaza tenebrosa para esclarecer el mis- terio de estos asesinatos y devolver la paz a ambas religiones.

Una interesante mirada, éxito de público y crítica en Francia, sobre el choque de cultu- ras, de la mano de Jean-Luc Istin (World War Wolves, Crónicas de Excalibur), el experto en temas célticos Thierry Jigourel y el espectacular Jacques Lamontagne (Aspic: Detectives de lo desconocido).[/note]

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CRÍTICA

Guión
Dibujo
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RESUMEN

Aventura medieval que nos lleva al mítico mundo celta, con el espectacular arte de Jacques Lamontagne

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