Últimamente han llegado a mis manos grandes obras, pero que poco dejaban a la imaginación… de hecho, mucho de lo que puedes leer hoy en día aboga justamente hacia la no interpretación. Los lectores de los superhéroes siempre hemos tenido que cargar con la pena de “vivir” historias muy definidas, sin nada que interpretar. Para librarnos de este mal, aquí llega Tony Sandoval, un mexicano que convierte una página en una obra de arte y que consigue transmitir lo que pocos pueden. Dibbuks nos trae un viaje mágico, lleno de fantasía, amor y acción con un dibujo fuera de lo común y único. Impresionaros con la portada, pero dejaros llevar por las sensaciones que desarrollaréis a lo largo de la aventura.
La Serpiente de Agua es la historia de una niña curiosa que se encuentra con un fantasma, un “recuerdo” de una niña que murió cuando tenía más o menos la misma edad que la protagonista, Mila. En seguida empieza una relación especial entre las dos muchachas y se convierte en habitual el que las dos se encuentren. Mila no cree que Agnes sea un fantasma, pero algo le fascina de ella, algo que le empuja a seguir viéndose con ella y seguirle el juego. realmente impactante de la relación de estas dos niñas es que el autor juega con la idea de Mila pueda estar incluso enamorada de Agnes, o de sus dientes… Sí, los dientes, quienes juegan un papel importantísimo en la trama principal. No es una historia al uso, pues el mundo onírico y la realidad se mezclan hasta tal punto que es muy difícil llegar a averiguar si lo que está sucediendo es en un sueño o en la “realidad”.
No quiero seguir explicando nada de la historia, y ya no por destripar el contenido de la misma, sino porque aunque sencilla a primera vista, se convierte en un enrevesado viaje fantástico con momentos mágicos pero incomprensibles a muchos niveles, cosa que dificulta mucho el hacer un resumen apropiado y ajustado a la obra. La Serpiente de Agua es perturbador a muchos niveles, tanto la obsesión de Mila por los dientes de Agnes como las escenas en las que aparece el pulpo producen esa sensación de malestar que tan bien le sientan a los cómics de ficción, pues dotan a la lectura de algo más que de escenas repugnantes, rompen la cuarta pared. Con eso no quiero decir que sean escenas asquerosas, sino que producen un repelús inquietante que hace que esta historia no sea una lectura más. Quizás despiste el principio del cómic, pues parece que todo se desarrolle en un mundo infantil, aunque como podréis comprobar eso es sólo una ilusión para provocar un contraste aún mayor. Otro de los elementos que ayudan al mayor disfrute de la obra es que esta no contiene grandes cantidades de texto, y cuando aparece, se apoya muchísimo en el dibujo.
El dibujo es sin duda lo que más llama la atención de La Serpiente de Agua. El uso de las acuarelas es impecable, es magistral. Tony Sandoval es un maestro en lo suyo y no encontraréis a ningún autor que haga lo que él. Cada página es una obra de arte, cada personaje parece sacado de un cuadro y cada pincelada está ejecutada con increíble precisión. Desde luego entra por la vista desde la primera página, con esos personajes cabezones pero adorables, aunque eso no le impide llevar a cabo escenas llenas de sensualidad casi inocente u otras llenas de acción y sangre, pero siempre con gran maestría. Los colores ayudan a situar la historia en un mundo fantástico, con unos verdes oscuros y apagados además de los grises y negros en las últimas páginas del cómic.
La edición de Dibbuks en cartoné con 144 páginas a color tiene un precio recomendado de 18€. No hay nada que objetar de la edición, pues además de tener unas ilustraciones increíbles, la calidad de las páginas es perfecta para poder disfrutar al máximo del color de cada trazo de Tony Sandoval.
¿Es recomendable La serpiente de agua? Pues qué gran pregunta… A mi me ha gustado mucho, no tanto por la historia, que puede tener sus defensores y detractores, o por el dibujo, impecable a todos los niveles, sino por esa sensación que comentaba antes, perturbadoramente sensual de inicio a fin. No es nada fácil llegar a transmitir sensaciones al lector en los tiempos que corren, donde no hay lugar a la interpretación y todos los detalles están presentes a lo largo de las viñetas. Doy gracias al señor Tony Sandoval por seguir creando obras vivas como La Serpiente de Agua después de Epidemia de Melancolía o Nocturno entre otros. El Mexicano está demostrando que tiene algo diferente que ofrecer y hay que apoyar lo distinto y rompedor y más cuando es tan bueno. No perdáis tiempo e id a comprar esta mágica maravilla en forma de cómic.
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