


Un fallo que cabe destacar es la falta de concordancia temporal en algunas escenas, como cuando Quasimodo aparece cubierto de vendajes justo después de haberse caído por la ventana o en el anecdótico momento en el que el monstruo esta viendo una versión en blanco y negro de ‘Frankenstein’ (cuya trama no transcurre tan deprisa como parece en este filme).
Toda película protagonizada por un grupo musical infantil que se precie debe contener varias canciones a lo largo del metraje, como ocurre en este caso con los temas ‘Bengalas de mil colores‘, ‘El show del Hombre Lobo‘, ‘Tumba Catatumba‘ y ‘El baile de los monstruitos‘, aunque resulta curioso que, siempre que los niños cantan, la música parezca salir de la nada.
Una cosa que debe quedar clara desde el principio es que se trata de una película dedicada al púbico infantil. Aún así, también es apta para ser disfrutada por aquellos que recuerden haberla visto de niños y sientan cierta nostalgia hacia ella. Si decides darle una oportunidad pero no te encuentras en ninguno de los dos casos mencionados, es posible que te aburra o te cause cierto bochorno, pero la verdad es que la película cumple con creces con la finalidad para la que fue rodada, de modo que no se le puede exigir más.
Es justo finalizar este análisis con el tema central del largometraje, que comparte título con el filme, cuya letra dice así:
Buenas noches, señor monstruo.
No me mire, por favor.
Buenas noches, señor monstruo.
Que me da mucho pavor.
Uno es Drácula, el conde.
¡Vaya, vaya, mira por donde!
Las persigue y las mata
y se les bebe su sangre
como si fuera un cubata.
Se levanta de la tumba,
lleno de gran vanidad,
y morder la yugular
a él le mola cantidad.
Buenas noches, señor monstruo.
No me mire, por favor.
Buenas noches, señor monstruo.
Que me da mucho pavor.
El otro es Quasimodo.
¡Me da miedo, me da todo!
Es cheposo y avispado.
Quiere a todos jorobar
porque él es jorobado.
Camina siempre torcido,
anda con muy mala pata
y se gusta de los niños
p’a comerlos con patatas.
Buenas noches, señor monstruo.
No me mire, por favor.
Buenas noches, señor monstruo.
Que me da mucho pavor.
Luego viene el Hombre Lobo.
¡Pero que susto más bobo!
Es una buena persona.
Se transforma en Hombe Lobo
cuando sale luna llena.
Ya cuando está transformado
por cualquier cosa se excita.
Y es más bestia y criminal
que el lobo de Caperucita.
Buenas noches, señor monstruo.
No me mire, por favor.
Buenas noches, señor monstruo.
Que me da mucho pavor.
Frankenstein es el doctor.
¡Da muchísimo terror!
Y al monstruo lo ha creado
con cerebros, brazos, pies
de cadáveres robados.
Tanto el doctor como el monstruo
disfrutan matando mozas,
pero por más que lo intentan
están ya un poco carrozas.
Buenas noches, señor monstruo.
No me mire, por favor.
Buenas noches, señor monstruo.
Que me da mucho pavor.
Buenas noches, señor monstruo.
Buenas noches tenga usted.
Buenas noches, señor monstruo.
Son ustedes demasié.
Son ustedes demasié.



