El primer tomo de la edición integral de Los Proyectos Manhattan, obra de Jonathan Hickman, Nick Pitarra y Jordie Bellaire, nos llega a través de Planeta Cómic
Tras su publicación en tomos en rústica, ahora Planeta Cómic ha optado por recuperar la serie de Jonathan Hickman y Nick Pitarra titulada Los Proyectos Manhattan en una edición integral de dos lujosos tomos. Y ya tenemos aquí el primero para disfrutar de esta desquiciada historia de grandes físicos, viajes interdimensionales y locuras paranoides…
Físicos ilustres
En pleno siglo XXI da la impresión de que una parte de la sociedad está guiñando el ojo al oscurantismo, la conspiranoia y la homeopatía en detrimento de la ciencia. Bebemos lejía para eliminar nuestros virus, soñamos con una Tierra plana, no nos creemos la llegada de Neil Armstrong a la Luna y desconfiamos de las vacunas por su alto contenido en microchips controladores de mentes. Un observador externo podría pensar, según en qué parte de la sociedad se fijara, que estamos más cerca de la Edad Media que de un brillante futuro tecnológico.
En este contexto no está de más destacar una obra como Los Proyectos Manhattan, ya que si dejamos de lado la delirante trama que nos presenta podemos apreciar un esfuerzo por parte de Jonathan Hickman de ensalzar algunas figuras históricas (por mucho que sus investigaciones pudieran haber tenido consecuencias absolutamente catastróficas en la práctica) de gran importancia en el terreno de la física que muy seguramente no tengan el mismo reconocimiento para la población general que la más reciente cantante pop de moda o el ganador del reality show de mayor audiencia.
Julius Robert Oppenheimer (quien muy seguramente estará en un futuro cercano en boca de todos gracias a la próxima película de Christopher Nolan) hizo famosa la frase del Bhagavad Gita “Ahora me he convertido en la muerte, el destructor de mundos” tras su participación en el desarrollo de la bomba atómica. Enrico Fermi tuvo un papel fundamental en teoría cuántica. Richard Feynman propuso el modelo Partón de física de partículas. Wernher von Braun fue responsable del desarrollo del cohete Saturno V. Albert Einstein…sí, a ese lo conoce todo el mundo gracias a las camisetas con su foto enseñando la lengua…
Todos ellos serán los principales protagonistas de una historia ucrónica que se sirve de episodios históricos para reinventar de la forma más macarra posible su papel en el devenir del siglo XX.
Llevando al extremo la ciencia ficción
El Proyecto Manhattan se dedicó durante la década de los años cuarenta al desarrollo y producción de las primeras armas nucleares por parte de Estados Unidos, Canadá y Reino Unido, bajo la dirección del general mayor Leslie Groves. Esa es la realidad que conocemos, pero Jonathan Hickman transforma esto en una fantasiosa y absurda trama de ciencia ficción en la que todo tiene cabida. ¿Y si en realidad el desarrollo de la bomba atómica solo fuera una tapadera de lo que realmente se estaba tramando en Los Proyectos Manhattan (en plural)?
Estos supergenios serán los cabecillas de una encarnizada batalla de proporciones multiversales en la que no solo tendrán cabida ellos, sino también sus contrapartidas dimensionales, oscuros cultos, robots samuráis o civilizaciones extraterrestres. Ver a Einstein como un John McClane entrado en años o a Wernher von Braun convertido en un cyborg solo son algunas de las muchas sorpresas que nos tiene deparadas ese maestro supremo de la desinformación que es Jonathan Hickman.
Los garabatos de Pitarra
Su estilo no es del gusto de todos, pero sería difícil imaginar a un artista más apropiado para una historia como esta que Nick Pitarra. Su estilo caricaturesco y sobrecargado no solo brilla a la hora de retratar de la forma que Hickman necesita a estos personajes históricos, sino que cuando llega el momento de desatar la locura Pitarra se arremanga y pone toda la carne en el asador, dejándonos algunas viñetas con las que se podría decorar el cuarto de un estudiante universitario.
Y parte de la culpa de que el apartado visual de Los Proyectos Manhattan sea tan sobresaliente es sin duda de la colorista Jordie Bellaire, una de las mejores en su campo, de esas que cuentan sus trabajos por éxitos. La conjunción de estos dos talentos da como resultado unas páginas cargadas de imaginación y locura a partes iguales. Y eso es lo que Los Proyectos Manhattan es, a fin de cuentas…
¿Para quién está hecha esta obra? Especialmente para aquellos que disfruten de la ciencia ficción más frenética. Y absolutamente para cualquiera con cierta afinidad por la física y su historia, o incluso por la geopolítica relacionada con la Segunda Guerra Mundial. Obviamente para disfrutar de esta obra hay que mirarla bajo el prisma del humor, ya que de lo contrario puede llegar a resultar hasta insultante…
El primer tomo integral de Los proyectos Manhattan publicado por Planeta Cómic se presenta en formato tapa dura sin sobrecubiertas. Contiene 464 páginas, con un tamaño de página de 18,3 x 27,6 cm, y presenta la traducción a cargo de Ignacio Bentz de los quince primeros números de la edición americana de la serie The Manhattan Projects. El precio de venta recomendado es de 45 € y se puso a la venta en abril de 2022.
Los proyectos Manhattan Integral 1
La ciencia al servicio del Mal según Hickman.
¿Y si el departamento de investigación y desarrollo creado para construirla primera bomba atómica hubiera sido la tapadera de otra serie de programas más inusuales? ¿Y si la unión de las mentes más brillantes de su generación no hubiera sido una señal para el optimismo, sino para la aprensión? ¿Y si… salió todo mal?
Este primer integral (de dos) recopila en edición de lujo la serie más personal de Jonathan Hickman y Nick Pitarra.
Autores: Jonathan Hickman, Jordie Bellaire y Nick Pitarra