The Walking Dead no se salva de la polémica por culpa de una denuncia que empezó en 2017
Cuando apenas queda nada para el final de la longeva serie de The Walking Dead sale a la luz una desagradable noticia. Varios productores de la serie, entre los que se encuentra el creador de los cómics originales, Robert Kirkman, han denunciado a AMC por el éxito de la explotación de la serie al igual que de sus spin-offs como Fear the Walking Dead. El monto de la denuncia asciende a un total de 200 millones de dólares.
La denuncia pretende que los productores de la serie recuperen algo del dinero que AMC ha ganado con The Walking Dead y derivados, pues parece que hubo una mala gestión en el cálculo que se hizo de las ganancias. Todo esto se denunció en 2017 pero esta parece ya la última acción desesperada por parte del equipo de la serie. Los productores han hecho una nueva alegación al respecto:
Por un lado, AMC les dice que no tienen derecho a nada basándose en fallos erróneos previos al juicio que están sujetos a apelación, mientras que AMC pagó 200 millones de dólares a Frank Darabont y CAA para evitar que un jurado de Nueva York revisara exactamente la misma definición de compensación contingente.
En lugar de conceder a los demandantes el beneficio del acuerdo con Darabont, tal y como exigen los términos expresos de sus contratos, la actividad creativa de AMC parece limitarse en estos días a idear nuevas formas de maltratar al talento responsable de su ya pasado éxito.
