jueves, marzo 28, 2024

“Dentro del Laberinto” y las marionetas

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Panini

De entre las películas del género fantástico “Dentro del Laberinto” (Labyrinth) es un clásico. Dirigida por Jim Henson en 1986, “Dentro del Laberinto” nos traslada a un mundo totalmente inventado lleno de fantasía y de seres de todo tipo, tanto simpáticos y agradables como algunos que dan terror.

Este film nos explica como Sarah, una adolescente Jennifer Connelly, tiene que hacerse cargo de su medio hermano Toby. Este encargo lo hace a disgusto, pues Toby no deja de llorar, y en un arrebato le pide a Jareth, el Rey de los Goblins interpretado por David Bowie, que se lo lleve. Así es como Sarah se ve involucrada en una búsqueda frenética de su hermano dentro del laberinto, ya que el Rey de los Goblins le asegura que si quiere recuperar a su hermano ha de resolver el laberinto en menos de trece horas.

El atractivo real que tiene toda esta historia radica, no en sus personajes de carne y hueso, sino en los que son controlados por seres humanos, es decir, las marionetas. A lo largo de toda la historia nos encontramos con toda clase de marionetas. Empezando por las típicas dirigidas por una mano en su interior…

… hasta las que son dirigidas por control remoto o por una persona en su interior.

Una de las grandes inspiraciones de Henson, tanto para los personajes como para el propio entorno del laberinto, han sido los ilustradores Maurice Sendak y Maurits Cornelis Escher. En el caso del último, lo más evidente de su influencia la vemos en la escalera laberíntica.

Pero sin duda, la escena en la que nos podemos quedar más alucinados por la gran cantidad y variedad de marionetas es en la que el gran David Bowie nos canta la canción “Magic Dance”. La pregunta que nos surge entonces es… ¿dónde se esconden todos aquellos que controlan a tantas marionetas?

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