Nuevos problemas en el horizonte para la franquicia Piratas del Caribe. Su quinta entrega no deslumbró a la crítica estadounidense, y desde Disney decidieron reiniciar la franquicia con un nuevo enfoque. Entre las medidas escogidas para esta nueva adaptación de Piratas del Caribe estaba prescindir de Johnny Depp y de su personaje Jack Sparrow, así como contratar a nuevos guionistas que le dieran otro enfoque a la franquicia. Los elegidos fueron los guionistas de Deadpool y Bienvenidos a Zombieland: Rhett Reese y Paul Wernick. Este nuevo enfoque prometía una versión más gamberra de la saga, pero los planes de la compañía se han truncado.
Hace pocos días salió a la luz que Reese y Wernick abandonaban el proyecto de Piratas del Caribe. Con esto la intención de crear una versión insolente de la saga, o tal como afirmaba Sean Bailey, jefe de producción de Disney: make pirates punk rock again se ha venido abajo. Precisamente este era el motivo para contratar a los guionistas de Deadpool, pero por lo que parece los propios guionistas han abandonado el barco. El futuro de este reinicio pasa a ser incierto, y dentro de Disney hay voces dispares sobre cómo proceder después de la perdida de guionistas.
Por un lado, hay un grupo que propone la búsqueda de nuevos guionistas, y por otro los que piensan que ha llegado el momento de abandonar la franquicia y dejar morir el proyecto. Sea como fuera, la que será la sexta película de Piratas del Caribe a día de hoy no tiene guionistas ni a una de sus estrellas Johnny Depp. La producción de la película se pone muy cuesta arriba para Disney, que ahora debe buscar nuevos guionistas que encajen en su idea original, o cambiar totalmente la idea e intentar salir del paso con otros escritores que si quieran participar en el proyecto.
