Boss Fight Entertainment es el tercer desarrollador de videojuegos comprado por Netflix en seis meses
Netflix prosigue su expansión en el ámbito de los juegos mediante adquisiciones. El jueves, la compañía anunció que adquiere su tercer estudio de juegos al comprar Boss Fight Entertainment. El desarrollador cuenta con un equipo de unas 150 personas, con sedes en Allen y Dallas, Texas, así como en Seattle, Washington. El trabajo anterior del estudio incluye el juego para móviles Dungeon Boss.
En los últimos meses, Netflix ha incrementado su presencia en el mundo de los videojuegos con la adquisición del desarrollador de Oxenfree, Night School Studio, y el equipo de móviles finlandés Next Games, que está detrás del juego de la popular serie de la plataforma, Stranger Things.
Mike Verdu, que fue contratado para dirigir el impulso de los juegos de la compañía después de haber trabajado en Facebook y Electronic Arts, dijo que Netflix pretendía distinguirse utilizando el atractivo de la marca de sus programas, que podrían convertirse en juegos. Un juego basado en un éxito de la plataforma podría interesar a los jugadores por el mero reconocimiento del nombre, aunque el servicio de streaming no tenga todavía la reputación de hacer títulos de juegos populares.
“La misión de Boss Fight es llevar experiencias de juego sencillas, bonitas y divertidas a nuestros jugadores dondequiera que quieran jugar”, dijeron los fundadores de Boss Fight Entertainment, David Rippy, Bill Jackson y Scott Winsett, en un comunicado incluido en el anuncio de la plataforma de streaming.
“El compromiso de Netflix de ofrecer juegos sin publicidad como parte de las suscripciones de los miembros permite a los desarrolladores de juegos como nosotros centrarse en la creación de juegos deliciosos sin preocuparse por la monetización. No podríamos estar más emocionados de unirnos a ellos en esta etapa inicial mientras seguimos haciendo lo que nos gusta hacer mientras ayudamos a dar forma al futuro de los juegos juntos.”
