El codirector de Encanto, Jared Bush, ha explicado el interesante razonamiento que hay detrás de esta distinción, y tiene mucho sentido
Cuando se estrenó Encanto el año pasado, los fans acudieron a las redes sociales para expresar lo mucho que se identificaban con las distintas canciones y personajes. Algunos incluso pidieron que la producción de Disney se trasladara a Broadway después de que la película de animación obtuviera un Oscar en la 94ª edición de los premios de la Academia. Lo que pareció gustar mucho a los espectadores es que cada miembro de la familia Madrigal tenía un don único, que era el núcleo de sus personalidades y fortalezas. Aunque algunos se preguntan por qué sus habilidades mágicas no se denominan superpoderes.
Encanto se centra en los Madrigal y en las maravillosas habilidades que utilizan para ayudar a su comunidad. Suena como una familia de superhéroes, ¿verdad? Pues no exactamente. Al responder a un fan que quería una aclaración sobre las habilidades de la familia que se llaman “dones” en lugar de “superpoderes”, Jared Bush explicó en Twitter que era una elección consciente. Incluso enumeró tres razones distintas, una de las cuales tiene que ver con los héroes.
“Sí, hay tres razones: 1) “dones” se parece más a la descripción de los talentos y habilidades especiales en un contexto familiar, 2) milagro -> don parecía una progresión más natural, 3) “poderes” parecía demasiado de superhéroes y queríamos evitar esa conexión en la medida de lo posible”.
El origen de las habilidades de la familia se ajusta más a los patrones de muchas mitologías antiguas que a los de muchos cómics. En este caso, un dios se conmueve ante la situación de un ser humano y le otorga un don que le ayudará a salir de la situación en la que se encuentra.
La mención de Jared Bush de que el término “dones” es más adecuado para el contexto familiar también tiene mucho sentido aquí. Al fin y al cabo, Encanto trata de ese tipo de dinámicas y de los impactos negativos que los familiares pueden tener, sin saberlo, unos sobre otros. Este es, sin duda, otro aspecto de la película con el que muchos fans parecen identificarse.
El cineasta probablemente tenga razón al pensar que el hecho de que las habilidades especiales se llamen superpoderes en lugar de “dones” cambiaría la forma en que vemos esos vínculos familiares. Sin duda, una película como Los Increíbles es entretenida y superdivertida, pero desprende unas vibraciones totalmente diferentes a las del musical ambientado en Colombia, aunque ambas películas de Disney se centren en una familia con una variedad de poderes sobrehumanos (o mágicos).