Ed Brubaker y Sean Phillips nos cuentan la historia con tintes sobrenaturales de un vigilante urbano en la edición Omnibus de Kill or be killed publicada por Panini Comics
Un cómic firmado por la pareja formada por Ed Brubaker y Sean Phillips no necesita más publicidad ni promoción que tener el nombre de estos dos bien visible en su portada. Da igual el tema o el género, a día de hoy tienen un 100% de efectividad en lo que a trabajos de calidad se refiere y no parece que esa estadística se vaya a romper pronto. Y a pesar de todo esto, en la edición omnibus que Panini Comics ha publicado de Kill or be killed nos encontramos con mucho más de lo que se podría esperar…
El dúo dinámico
Estamos acostumbrados a ver a Brubaker y Phillips, los reyes del noir, en historias similares a lo que hicieron en Criminal durante años. Reckless, Donde vi el cadáver, Night Fever, The fade out o Pulp son tan solo algunos ejemplos de lo que este dúo ha hecho en las últimas décadas, trabajos con los que se han ganado ser considerados no solo los mejores autores de este género sino también uno de los equipos artísticos más sólido, fiable y genial de la historia del cómic.
En ocasiones se han salido de su zona de confort para introducir elementos sobrenaturales o de índole superheróica en sus historias, siendo las geniales Fatale e Incognito buenos ejemplos de esto. Y en esta categoría de mezcla de géneros es donde deberíamos meter a Kill or be killed, un trabajo que sorprende por su planteamiento pero no por la excelencia de la que hace gala.
Te mato o me matan
La premisa de la historia no podría molar más. Ni aunque hubiera salido de la cabeza de Donny Cates. Dylan, un joven no muy afortunado en la vida con tendencias suicidas, ve cómo su vida da un vuelco cuando una noche una especie de demonio se le aparece en la cama y le da un mensaje que no puede ser ignorado: Dylan morirá a no ser que mate a una persona que se lo merezca.
Una vez superado el impacto de la aparición sobrenatural, la historia transita por un ámbito más terrenal convirtiendo a nuestro protagonista en una especie de vigilante enmascarado que se encarga de buscar a alguien que merezca morir (y cuyo asesinato sea algo asequible para un asesino sin experiencia alguna con las armas) para posteriormente acabar con su vida, como si de un inexperto Punisher enmascarado de la vida real se tratara. Y todo se irá complicando más aún cuando tras su primer asesinato Dylan comprenda que su deuda con este demonio no ha hecho más que empezar…
Veremos al joven reconvertido a vigilante urbano lidiar con las implicaciones morales de sus actos a la vez que se esfuerza por cumplir con su parte del trato y se enfrenta a los problemas personales que asolan su vida, en especial en lo que se refiere a su relación romántica (o no) con Kira, la novia de su compañero de piso. Todo muy peterparkiano. Y todo eso mientras por una parte decide si todo lo que le ha ocurrido es algo real o es más bien que su locura ha llegado a un límite que ni él mismo podría haber presagiado y por otra es perseguido tanto por la policía como por la mafia rusa…
Brubaker, tal vez aquí influido por la figura de David Berkowitz (el Hijo de Sam, responsable de seis asesinatos a finales de la década de los años setenta que afirmó que un demonio que había poseído al perro de su vecino le ordenó cometer sus crímenes), narra con maestría en primera persona las desdichas de Dylan, sus éxitos, sus fracasos y sobre todo esos momentos en los que su destino está en el filo de la navaja. Y Phillips por su parte, con el apoyo de Elizabeth Breitweiser al color, realiza un trabajo excelente con su estilo realista habitual.
Una edición matadora
Anteriormente esta obra había sido recopilada en cuatro tomos, pero esta edición es más apropiada para disfrutar de seguido de una historia a la que no se le pueden poner pegas. Es una barbaridad en todos los aspectos, y para colmo cierra con un final sorprendente (y, curiosamente, a la vez esperado) que se siente satisfactorio, como llegar a un destino tras un increíble viaje para encontrar todo lo que se había deseado.
En cuanto a la magnífica edición, el tomo de lujo de la línea Kill or be killed Omnibus publicado por Panini Comics en formato cartoné contiene 624 páginas con un tamaño de 18 x 27,5 cm. a color. Incluye la traducción de la edición americana de los veinte números de los que consta la serie original. También incluye una sección final cargada de material extra con ilustraciones y portadas entre otras cosas. El precio de venta recomendado de este tomo es de 60 € y se puso a la venta en noviembre de 2023.
Kill or be killed Omnibus
El equipo de Criminal y Fatale vuelve con la historia de un joven que se siente forzado a matar a malas personas.
Tanto thriller como deconstrucción del vigilantismo, Kill or Be Killed es distinto a cualquier otra cosa que hayan hecho antes Brubaker y Phillips.
Autores: Ed Brubaker, Elizabeth Breitweiser y Sean Phillips