El 8º episodio de Daredevil: Born Again revela la verdad tras el asesinato a Foggy Nelson

El 8º capítulo de Daredevil: Born Again recupera a Bullseye en su versión más brutal y resuelve el misterio de Foggy Nelson

Cuando parecía que ya lo habíamos perdido para siempre, la sombra de Foggy Nelson vuelve a planear sobre el universo Marvel. El octavo episodio de Daredevil: Born Again, titulado Isle of Joy, pone la carne en el asador y responde de forma contundente a una de las grandes incógnitas que ha mantenido en vilo a los fans desde el primer episodio: ¿realmente está muerto Foggy? ¿Y quién movió los hilos en la sombra para silenciarlo?

La verdad sobre Foggy Nelson sacude el universo Marvel

La escena que lo cambió todo fue rápida y brutal: Foggy caía abatido a tiros por Bullseye durante el primer episodio. Pero algo no encajaba, y Matt Murdock también lo sabía. En Isle of Joy, el penúltimo capítulo de la temporada, Matt finalmente ata cabos y descubre que su amigo y compañero estaba a punto de ganar un caso que podía dinamitar el mundo criminal desde dentro. Su muerte no fue un acto de locura ni una venganza cualquiera: fue un movimiento calculado para callar una verdad demasiado incómoda.

La pista lleva a Matt a interrogar al mismísimo Bullseye, quien está siendo trasladado a población general en prisión. La tensión se corta con cuchillo cuando el Hombre sin Miedo pierde el control y estrella la cabeza de Dex contra la mesa. Pero ese momento de furia tiene consecuencias: le da a Bullseye la oportunidad perfecta para ejecutar un plan que los lectores de cómics reconocerán al instante.

Un asesino que nunca deja el trabajo a medias

Con un diente suelto como única herramienta, el despiadado asesino escapa de su celda en una secuencia que rinde homenaje directo a los cómics. Y lo que viene después es aún más salvaje.

Mientras tanto, se desvela el nombre de la verdadera culpable detrás del asesinato de Foggy: Vanessa Fisk, la nueva Kingpin de Nueva York. Ni más ni menos. Fue ella quien ordenó eliminar a Foggy, temiendo que el caso en el que trabajaba sacase a la luz sus negocios ilegales. Y lo más retorcido: utilizó su influencia para liberar a Bullseye y enviarlo tras el mejor amigo de Matt.

Una fiesta, un baile y un disparo mortal

En un giro que recuerda a los mejores thrillers noir, Matt confronta a Vanessa en mitad de una fiesta, compartiendo un tenso baile que esconde acusaciones, verdades amargas y miradas llenas de rabia contenida. Pero antes de que pueda llegar la venganza, Bullseye aparece en escena con la intención de asesinar a Wilson Fisk. El disparo suena… pero no impacta en quien él pretendía.

Matt Murdock se interpone y recibe la bala, salvando irónicamente la vida de su mayor enemigo. El episodio termina con Daredevil sangrando en el suelo, dejando en el aire su destino y sembrando la semilla para un final de temporada que promete ser devastador.

La redención de una serie renacida

Este episodio 8 marca un punto de inflexión no solo para los personajes, sino para la serie en sí. Después de varios altibajos y cambios de tono, Daredevil: Born Again recupera el pulso, el estilo y la tensión que hicieron grande a la original de Netflix. Y no es casualidad: Isle of Joy ha sido escrito y dirigido por el nuevo equipo creativo que se encargará del rumbo de la serie a partir de ahora.

Todo apunta a que la segunda temporada estará en buenas manos. Aquí no hay muertes al azar ni giros vacíos: cada decisión tiene peso, cada escena construye algo mayor.

Y ahora que sabemos que Foggy murió por una razón, que Vanessa ha emergido como la nueva villana principal y que Bullseye está desatado de nuevo, el tablero está listo para un desenlace tan trágico como explosivo. El episodio final no será apto para corazones débiles, y que quienes han seguido esta temporada hasta aquí, no querrán perdérselo por nada del mundo.