La sinopsis oficial de Penguin Random House no se anda con rodeos:
“En el mundo volcánico de Mustafar, Vader lleva a cabo un ritual oscuro, haciendo sangrar un cristal kyber para forjar su sable de luz. Este acto libera un poder mucho mayor de lo que anticipaba, dándole una visión del potencial ilimitado de la Fuerza”.
Este ritual no es nuevo para los lectores más entregados de la saga. Ya lo vimos en el Darth Vader #5 (2017) de Marvel, dentro de la serie Dark Lord of the Sith escrita por Charles Soule con arte de Giuseppe Camuncoli. Aquel cómic nos mostró cómo Vader construyó su nueva identidad física y mental tras los eventos de Revenge of the Sith. Sin embargo, la novela no sustituye ese canon, sino que propone una mirada más íntima, más emocional y más terrorífica.
Hasta ahora, este tipo de rituales se habían explorado brevemente en videojuegos como Jedi: Fallen Order o en pequeñas pinceladas dentro de Tales of the Jedi. Pero esta será la primera vez que veremos a Darth Vader atravesarlo como protagonista. Y eso, para los fans que llevan años conectando piezas entre películas, series, cómics y juegos, es un caramelito irresistible.
Y lo hará sin necesidad de contradicciones ni reinvenciones. Master of Evil se presenta como un complemento perfecto a todo lo que ya sabemos, ampliando y profundizando sin borrar nada. Una decisión que seguro agradecerán quienes llevan años invirtiendo tiempo y emoción en cada rincón del lore de Star Wars.
Reserva abierta para los que sienten la llamada del Lado Oscuro
Para muchos, será una lectura intensa, poderosa y reveladora. Y para otros, una oportunidad única de entender, al fin, cómo nació verdaderamente uno de los villanos más icónicos del cine.