DC conmociona a los fans con la revelación de uno nuevo lazo familiar

Una revelación explosiva en el universo DC convierte a Resurrection Man y Vandal Savage en los nuevos Caín y Abel del cómic

El héroe que siempre vuelve de la muerte y uno de los villanos más antiguos del universo DC comparten un vínculo de sangre que lo cambia todo. Así, Resurrection Man: Quantum Karma #3 se convierte en uno de los números más impactantes del año al confirmar que Mitch Shelley y Vandal Savage son hermanos… y no unos cualquiera, sino los primeros hermanos de la humanidad según la mitología DC: los equivalentes a Caín y Abel.

Resurrección, traición y un lazo milenario

En esta nueva serie Black Label escrita por Ram V y con arte de Anand RK y Butch Guice, la historia de Resurrection Man da un giro tan inesperado como brillante. Lo que parecía otro cómic sobre viajes temporales y poderes regenerativos, se transforma en una épica de proporciones bíblicas gracias a la aparición del enigmático Phantom Stranger. Este personaje, testigo de milenios, narra cómo dos hombres primitivos fueron tocados por una estrella caída del cielo… y uno mató al otro.

Ese crimen ancestral no fue obra de cualquiera: el asesino era Vandal Savage, y la víctima resucitada fue Mitch Shelley, quien desde entonces se convertiría en Resurrection Man. En vez de vengarse, Shelley eligió el camino contrario: la redención frente al salvajismo, la vida frente a la destrucción.

Una nueva narrativa para dos personajes olvidados

La revelación de que Resurrection Man y Vandal Savage son hermanos inmortales no solo es poética, sino que funciona como una herramienta narrativa poderosa. Savage, clásico villano inmortal de DC, ha sido antagonista de la Liga de la Justicia, de Batman, y de todo héroe con siglos de historia. Pero rara vez ha tenido un rival que estuviese a su altura… hasta ahora.

Por su parte, Mitch Shelley siempre ha sido un personaje de culto. Su serie de los 90 y su relanzamiento en The New 52 nunca llegaron a cuajar del todo. Faltaba algo. Y ese “algo” podría ser justo lo que ahora ofrece Quantum Karma: un enemigo personal con el que comparte origen, sangre y condena.

¿Qué mejor antagonista para un villano inmortal que un héroe que no puede morir? Esta enemistad primigenia promete convertir su historia en una tragedia mítica, una rivalidad tan poderosa como la de los eternos Batman y Joker, pero escrita en los huesos de la humanidad.

Los dioses del universo DC vuelven al principio

Este nuevo enfoque conecta la historia de DC con los albores de la civilización, justo como hizo Neil Gaiman en The Sandman o Grant Morrison en Final Crisis. El cómic juega con conceptos cósmicos, caídas de estrellas que otorgan poder, y la clásica pregunta de qué harías si tu hermano destruyera todo aquello que valoras.

Resurrection Man, por ahora, no ha matado a Savage, ni siquiera tras recordar que fue él quien acabó con su vida original. Esa contención lo humaniza, lo aleja del cliché del héroe vengativo, y refuerza la idea de que, a veces, el mayor poder no es resucitar, sino elegir no matar.

Un futuro inmortal para ambos

El detalle clave aquí es que, al tratarse de un título de DC Black Label, esta revelación no es canon oficial del universo principal… todavía. Pero si algo nos ha enseñado Three Jokers, Batman: Damned o incluso Harleen, es que muchas de estas historias acaban influyendo en las series principales tarde o temprano.

DC tiene en sus manos una nueva mitología, una oportunidad de elevar a dos personajes con muchísimo potencial narrativo. Convertir a Resurrection Man en el némesis eterno de Savage no solo da sentido a su nombre, sino que añade un nuevo nivel de profundidad a sus resurrecciones: cada nueva vida podría ser un paso más en su eterno duelo fraternal.

¿Qué más podríamos ver en esta nueva era?

Si DC decide continuar con esta línea, no sería extraño ver a Mitch Shelley interactuar con otros inmortales del universo DC, como Ra’s al Ghul, el Capitán Atom o incluso los Nuevos Dioses. La propia historia de Vandal Savage ha estado ligada a siglos de conquistas, pactos oscuros y experimentos con metahumanos. ¿Y si Resurrection Man hubiera estado ahí todo el tiempo, observando desde las sombras?

Además, esta relación fraternal podría reescribir grandes eventos del pasado DC bajo una nueva luz: dos hermanos en guerra, luchando por el alma del mundo desde tiempos inmemoriales.