El legendario Mel Brooks vuelve como Yogurt a los 99 años en una secuela que no es precuela, ni reboot… ¿o sí?
La secuela que se rinde a la absurdez… otra vez
Con esta declaración de intenciones, queda claro que la secuela se reirá tanto del universo Star Wars como del propio cine de franquicia que ha dominado Hollywood las últimas décadas.
La película se describe oficialmente como “Una secuela que no es precuela ni reboot, pero que tiene elementos de reboot. Una expansión de franquicia con parte dos incluida”. Vamos, que ni ellos mismos se aclaran, y ese es precisamente el chiste.
El retorno de los clásicos… y nuevos refuerzos
Pero la verdadera bomba es el regreso de Rick Moranis como Dark Helmet, uno de los villanos más hilarantemente ridículos del cine. Moranis, que llevaba 30 años alejado de la gran pantalla, ha decidido volver para ponerse una vez más el casco más absurdo de la galaxia. Un regreso que, sinceramente, nadie esperaba… pero todos celebramos.
El Schwartz sigue vivo
Entre Yogurt, que enseñaba el poder de “la Schwartz”, y los constantes rompimientos de la cuarta pared, la película se convirtió en una comedia de culto con un humor irreverente, autoconsciente y más vigente que nunca.
Durante años, el propio Brooks bromeó con un posible La loca historia de las galaxias 2: La Búsqueda de Más Dinero, pero nunca llegó a materializarse… hasta ahora.
Cómo nació la secuela que nadie esperaba pero todos querían
Gad, entre sudores y nervios, desgranó cada gag, cada escena y cada referencia al universo expandido galáctico, como si se jugara la vida ante el maestro de la comedia. Por suerte, funcionó.
El proyecto fue anunciado por primera vez en junio de 2024, y desde entonces ha crecido en expectación, especialmente tras la confirmación del regreso de Moranis.
¿Una burla al cine actual o un homenaje con “Schwartz”?
Más que una continuación de la historia, La loca historia de las galaxias 2 parece tener la intención de parodiar cómo ha evolucionado (o involucionado) el cine comercial desde los 80 hasta ahora. La sobreexplotación de sagas, los múltiples reboots, precuelas, secuelas, spin-offs y multiversos parecen ser el blanco principal de esta nueva entrega.
Si La loca historia de las galaxias era una sátira a la trilogía original de Star Wars, esta nueva versión apunta directamente a la era de Disney, Marvel, los remakes de Jurassic Park y todo lo que huela a franquicia eterna.
En otras palabras: prepárate para una lluvia de referencias, cameos imposibles, humor meta y mucha, mucha autoconsciencia.