Rumores y confirmaciones que apuntan a un futuro multiplataforma más ambicioso
Los rumores vuelven a encender la llama entre los fans de Final Fantasy. Todo apunta a que Final Fantasy VII Remake y su esperada secuela Final Fantasy VII Rebirth podrían llegar no solo a PlayStation y PC, sino también a Switch 2 y Xbox Series X|S. La noticia no deja de ser sorprendente, sobre todo porque Square Enix llevaba años apostando por exclusividades temporales.
Según filtraciones recientes, Rebirth desembarcaría en 2026 en estas consolas, con la ayuda del DLSS para mantener el rendimiento en la máquina de Nintendo. Aunque la compañía no lo ha confirmado oficialmente, este movimiento encajaría con su nueva estrategia: alejarse de la exclusividad y expandir su público lo máximo posible.
Final Fantasy llega a nuevos horizontes
La llegada de Final Fantasy VII Remake a Switch 2 y Xbox está prevista para finales de 2025, un estreno que podría anunciarse en el rumoreado Nintendo Direct de septiembre o incluso en el Tokyo Game Show 2025. La jugada tiene sentido si recordamos lo que ocurrió con Final Fantasy XVI, lanzado por sorpresa en Xbox el pasado junio.
Además de los juegos principales de Cloud y compañía, se ha confirmado un proyecto que muchos veteranos llevaban años esperando: el remake de Final Fantasy Tactics, rebautizado como The Ivalice Chronicles. Este título no solo aterrizará en Switch y Switch 2, sino también en PlayStation 4, PlayStation 5, Xbox Series X|S y PC. Por primera vez, los jugadores de Xbox podrán disfrutar de este clásico táctico que hasta ahora había permanecido ligado a la marca PlayStation.
El legado de Tactics y la promesa del online
No es la primera vez que Nintendo se cruza en el camino de la saga táctica. Ya en su día recibió Final Fantasy Tactics Advance y A2, dos entregas que consolidaron la franquicia en portátiles. Sin embargo, este nuevo remake supone el regreso del clásico de 1997 con una versión que apunta a conquistar tanto a nostálgicos como a nuevos jugadores.
Por si fuera poco, Naoki Yoshida, director de Final Fantasy XIV, ha vuelto a insinuar que el exitoso MMORPG podría estar entre los planes de Square Enix para Switch 2. Tras su desembarco en Xbox Series X|S en 2024, llevarlo a la consola híbrida de Nintendo sería otro paso en la conquista multiplataforma.
Un futuro lleno de posibilidades
Aunque todo esto todavía se mueve entre confirmaciones puntuales y rumores bien fundados, lo cierto es que el panorama pinta mejor que nunca para los seguidores de la saga. Square Enix parece decidida a dar a sus juegos una mayor proyección global, rompiendo las barreras de las exclusividades que durante años frustraron a muchos jugadores.
Si los planes se cumplen, en apenas un par de años veremos cómo Switch 2 y Xbox Series X|S se llenan de títulos que antes parecían imposibles en su catálogo. Y eso no solo beneficiará a la comunidad, sino que podría revitalizar el interés por entregas clásicas y experimentos futuros.
El fin de la era de las exclusividades
Para entender el impacto de esta noticia, hay que mirar atrás. Durante décadas, la saga Final Fantasy estuvo marcada por la guerra de consolas. La primera entrega llegó a Nintendo NES en 1987 y las siguientes continuaron en Super Nintendo, pero en 1997 Square dio un giro radical llevando Final Fantasy VII a la primera PlayStation, dejando a Nintendo atrás en uno de los movimientos más comentados de la industria.
Ese salto a Sony marcó toda una generación: PlayStation se convirtió en el hogar de Final Fantasy, desde la séptima hasta la duodécima entrega numerada. No fue hasta la llegada de Xbox 360 y PlayStation 3 que la exclusividad empezó a diluirse, con Final Fantasy XIII disponible en ambas consolas.
El giro actual de Square Enix va más allá: no solo busca publicar en todas las plataformas, sino hacerlo con plazos más cortos y con lanzamientos casi simultáneos. El hecho de que Rebirth pueda llegar a Switch 2 y Xbox apenas dos años después de su estreno en PlayStation 5 demuestra un cambio de filosofía. En un mercado global dominado por juegos multiplataforma, el futuro de la saga parece apuntar a estar en todas partes, para todos.
Para los jugadores, esto supone el final de la incertidumbre y el inicio de una nueva era en la que Final Fantasy dejará de ser un símbolo de exclusividad para convertirse en un referente compartido por toda la comunidad.


