El equipo detrás del fenómeno de terror desmiente tres teorías y promete un rumbo aún más impredecible
Desde su estreno en 2022, From ha sido una de esas series que dejan a los espectadores con la cabeza dando vueltas después de cada episodio. Con su atmósfera opresiva, su elenco brillante y una historia llena de misterios, la serie de MGM+ ha generado un sinfín de teorías. Pero los creadores han decidido acabar con tres de las más populares: los personajes no están soñando, no están muertos y no están en el purgatorio.
From y sus misterios más inquietantes
Desde el primer episodio, From juega con la mente del espectador. Un grupo de personas atrapadas en un pueblo del que nadie puede salir, criaturas que atacan al caer la noche, y un bosque que parece cambiar de forma según la voluntad de algo desconocido. Era inevitable que los fans imaginaran todo tipo de explicaciones.
Algunos estaban convencidos de que todo era un sueño compartido, un experimento mental o una simulación colectiva. Otros apostaban por la teoría más clásica: el purgatorio. Incluso el propio Padre Khatri, dentro de la trama, llegó a sugerir que podrían estar muertos y viviendo una especie de penitencia eterna.
Sin embargo, John Griffin y Jeff Pinkner, creadores y productores de la serie, acaban de zanjar el debate. En una reciente entrevista, afirmaron rotundamente: “No es el purgatorio. No es un sueño. No están muertos.” Tres frases que cambian por completo la manera de entender lo que está ocurriendo en esa pequeña y terrorífica localidad.
Qué significa esto para el futuro de From
Este desmentido no solo echa por tierra años de teorías en foros y redes sociales, sino que también abre nuevas puertas narrativas. Si los personajes están vivos y conscientes, entonces el misterio es mucho más físico, más tangible… y, por tanto, más aterrador.
La serie podría explorar dimensiones paralelas, experimentos secretos o fuerzas sobrenaturales que operan bajo reglas aún desconocidas. Al eliminar las explicaciones “fáciles” —como un sueño o un limbo espiritual—, los creadores elevan la tensión y la curiosidad del público.
Además, el propio tono del show se beneficia de este giro. En lugar de repetirse con recursos ya usados en series como Lost o películas como El sexto sentido, From se consolida como una propuesta original dentro del terror televisivo contemporáneo, más cercana a las pesadillas de Stephen King que a los giros filosóficos de Dark.
Harold Perrineau y el peso del misterio
El actor Harold Perrineau, quien interpreta al atormentado Boyd Stevens, ha sido el corazón de la serie desde el principio. Su personaje simboliza la desesperación humana frente a lo inexplicable, y esta nueva confirmación le da todavía más profundidad.
Si Boyd no está soñando ni purgando sus pecados, su sufrimiento es real. Cada decisión que toma, cada pérdida, cada criatura a la que se enfrenta, ocurre en un mundo físico que obedece leyes que aún desconocemos. Y eso lo hace mucho más escalofriante.
En declaraciones previas, Perrineau había mencionado que From “no trata solo de miedo, sino de cómo las personas se enfrentan a la desesperanza”. Ahora, con la certeza de que el pueblo no es una ilusión ni un castigo divino, esa lucha se vuelve más visceral y más trágica.
Una cuarta temporada con más respuestas… y más preguntas
Aunque aún no hay fecha confirmada para la temporada 4, los creadores prometen que esta nueva entrega comenzará a revelar las grandes respuestas. Griffin ha señalado que “el público merece saber por qué están ahí y quién está detrás de todo esto”. Sin embargo, si algo ha demostrado From, es que cada respuesta trae consigo tres nuevas incógnitas.
A estas alturas, la serie se ha convertido en un fenómeno del horror televisivo, con una comunidad de fans entregados que diseccionan cada plano en busca de pistas. El hecho de que sus responsables descarten las teorías más “previsibles” demuestra una ambición narrativa poco común.
El camino hacia lo desconocido
From podría haberse conformado con ser otro relato sobre almas perdidas o sueños dentro de sueños. En cambio, ha elegido un camino más arriesgado, impredecible y refrescante. Lo que ocurre en ese pueblo no es una ilusión ni una penitencia: es una pesadilla real, y los personajes tendrán que enfrentarse a ella con cuerpo y mente.
Quizás ahí reside la verdadera esencia del terror de From: no temer a lo que hay después de la muerte, sino a lo que puede esconderse dentro de la vida misma.


