Scott Snyder vuelve a llevar al límite a Superman, Batman y compañía en un torneo controlado por Darkseid que pondrá en juego el alma del universo DC
Durante años, Darkseid ha sido la encarnación del mal en el Universo DC. Pero lo que está a punto de suceder en DC K.O. va más allá de cualquier guerra cósmica anterior. Scott Snyder y Javier Fernández regresan con una historia que combina poder absoluto, corrupción y una batalla sin compasión entre los héroes más grandes de la editorial. El fin del universo DC tal como lo conocemos podría empezar aquí.
Todo arranca con la publicación de DC K.O. #1 (de 4), un evento que, según Snyder, “representa el choque final entre la energía Omega de Darkseid y la voluntad de los héroes por resistir la corrupción absoluta”. El propio autor ha confirmado que K.O. no son simples iniciales, sino que significan King Omega, el nuevo título que el villano adopta al alcanzar un poder divino capaz de alterar la realidad misma.
Darkseid y el Reino Absoluto
El punto de partida de DC K.O. hunde sus raíces en una revelación impactante: los antiguos kryptonianos crearon el Dispositivo Omega, un artefacto con el que Darkseid ha logrado dominar la energía primordial del universo. Ese descubrimiento provoca una reacción en cadena que fusiona el corazón de Apokolips con la Tierra, transformándola en un campo de batalla infernal conocido como el Reino Absoluto.
Según explica Snyder, “Darkseid ha trascendido el espacio y el tiempo. Ya no es solo un dios de la destrucción, sino una fuerza que absorbe toda existencia hasta que solo queda su voluntad”. En este escenario, la Liga de la Justicia y el resto de héroes deben enfrentarse a lo imposible: detener a una entidad que ya lo ha conquistado todo en el futuro.
Pero la única forma de hacerlo es convertirse en aquello que temen. Los héroes deberán absorber la energía Omega, la esencia misma del control y la destrucción, hasta que uno de ellos se vuelva tan poderoso como Darkseid. El problema es que cuanto más se acercan al corazón de Apokolips, más los corrompe esa energía, convirtiéndolos en versiones distorsionadas de sí mismos.
El torneo de los dioses
La historia toma un giro brutal cuando el propio corazón de Apokolips, dotado de conciencia, crea un torneo para decidir quién es digno de su poder. Cinco niveles, una sola regla: vencer sin compasión.
Snyder lo describe como “un battle royale de proporciones divinas”, en el que los héroes deben derrotarse entre ellos para demostrar que son dignos del poder absoluto. Aquellos que muestren piedad o intenten ayudar a sus compañeros serán rechazados por el propio dispositivo, incapaces de generar suficiente energía Omega para sobrevivir.
Así, Batman, Wonder Woman, Flash, Green Lantern y Superman se enfrentan en una batalla por la salvación del universo que amenaza con convertirlos en sus peores enemigos. El tono recuerda a los grandes eventos de la editorial, pero con un enfoque más introspectivo: no se trata solo de quién gana, sino de qué queda de su humanidad tras la lucha.
El legado del multiverso y el Absolute Universe
Los ecos de DC K.O. alcanzan incluso el llamado Absolute Universe, introducido en Absolute Evil por Al Ewing y Giuseppe Camuncoli. Snyder explica que la energía Omega está conectada a ese universo alternativo, donde la materia misma se construye a partir de partículas conscientes que tienden a la oscuridad.
Esto implica que la corrupción de Darkseid tiene raíces en la creación misma del multiverso, y que su dominio podría significar la fusión total de ambos planos: el universo DC tradicional y el Absoluto. En palabras del guionista, “hay algo en el corazón de la creación que late con voluntad propia… y se inclina hacia la oscuridad”.
Mientras tanto, los científicos y místicos del Quantum Quorum —una alianza que combina a héroes como Mister Terrific, Zatanna y Atom— tratan de entender el fenómeno. Pero cada respuesta abre un nuevo abismo, una nueva pregunta sobre si la realidad misma puede resistir el poder del King Omega.
El precio del poder
La idea central de DC K.O. es demoledora: para derrotar a Darkseid, hay que convertirse en él. Los héroes deben elegir entre mantener sus ideales o sacrificarlos para salvarlo todo. En este conflicto se pone a prueba lo que significa ser un héroe dentro del universo DC.
Como adelanta la sinopsis oficial, “cuanto más cerca estén del corazón de Apokolips, más los transformará, haciéndolos peligrosos incluso entre sus propios aliados”. La corrupción, la ambición y la desesperación serán los verdaderos enemigos, y solo uno podrá llegar al final. El propio Booster Gold llega a referirse al escenario como el Reino Absoluto, un nombre que define perfectamente la dimensión de esta guerra final.
Un evento que redefine el canon
Con DC K.O., Scott Snyder y Javier Fernández retoman la épica cósmica de Metal y Death Metal, pero llevándola un paso más allá. El evento promete cambiar las reglas del multiverso, cuestionando si la luz puede sobrevivir cuando se enfrenta a su propia sombra.
Visualmente, Fernández ofrece un arte intenso, con paisajes de fuego, dioses demente y combates que mezclan poder físico y energía cósmica, mientras Snyder teje un relato que une pasado, presente y futuro del Universo DC. La edición en EE.UU. llega este 8 de octubre de 2025 con un precio de 5,99 dólares, y marca el inicio de una saga que promete ser el enfrentamiento definitivo entre Darkseid y todo lo que representa la esperanza.



