Y todos, absolutamente todos, le siguen sin rechistar. Le llaman “sir”. Le obedecen. Le admiran.
Este no es el Cyborg que se queda en la torre reparando sistemas. Es un general curtido en mil batallas, que reparte órdenes y reconocimiento como quien reparte justicia en un mundo roto.
Un nuevo estilo que dice más de lo que parece
La parte estética no se queda atrás. El look de Victor con melena desordenada y una barba cerrada le da un aire de veterano postapocalíptico que encaja como anillo al dedo en el caos de World War V. Lejos de ser una decisión de moda, su aspecto es una evolución visual de su nuevo estatus. Más maduro, más decidido, más líder.
Durante años, el rol de líder en los Titanes ha sido compartido entre Nightwing, Donna Troy o Starfire. Pero este cómic plantea una alternativa con argumentos de peso: Victor no solo tiene el poder y el conocimiento técnico, también tiene carisma, estrategia y humanidad. Y lo demuestra sin que parezca forzado ni fuera de lugar.
Además, no es la primera vez que el personaje pide a gritos una reinvención más ambiciosa. En otras series, como Justice League Odyssey o Teen Titans, ya hemos visto atisbos de lo que puede ofrecer si se le da espacio. Pero nunca con esta fuerza.
Y si encima lo acompañan con un equipo tan rompedor como este, las posibilidades son infinitas.