Uno de los mitos más repetidos de la película se tambalea tras una reunión del reparto original y unas declaraciones de Sean Astin
El mito del barco de Willy el tuerto
Sean Astin, que interpretó a Mikey, confesó que esa historia le parecía un poco ofensiva:
“Me molestaba un poco que pensaran que no sabíamos actuar reacciones reales. ¡Las hacíamos todo el tiempo!”
Pero no solo lo dijo. Fue más allá:
“Yo vi el barco antes de rodar. Lo curioso es que decidí actuar como si fuera la primera vez que lo veía para que pensaran que habían capturado una reacción genuina. Y durante 40 años han creído que lo lograron.”
¡Zas! Uno de los momentos más comentados detrás de las cámaras de Los Goonies… podría haber sido una pequeña actuación dentro de otra actuación.
¿Entonces todo era mentira?
No del todo. Mientras Astin jugaba al despiste, Martha Plimpton (Stef) sí vivió lo que muchos fans creían:
“Mi reacción fue honesta.” dijo con firmeza.
Joe Pantoliano (Francis Fratelli) le preguntó divertido: “¿Cuántas tomas hicieron de tu reacción?”
A lo que ella respondió con estilo: “Una. Es todo lo que necesitaban, cariño.”
¿Una historia nacida para durar?
El barco en cuestión, el Inferno, medía más de 30 metros y fue construido a tamaño real dentro de un estudio. Era una obra de arte en sí mismo, y lo lógico es pensar que todos los actores tendrían curiosidad por verlo. Feldman reconoció que se coló a escondidas para echarle un vistazo, lo que da aún más juego a la idea de que cada miembro del reparto vivió ese momento a su manera.
Pero tras estas declaraciones, queda claro que la verdad no era tan cinematográfica como la versión extendida por el fandom. Lo que sí es cierto es que tanto la película como sus actores siguen generando emoción incluso cuarenta años después.
Un legado que sigue intacto
Quizá esa sea la verdadera leyenda. Y si de paso creímos durante años que esa emoción venía de una sorpresa improvisada, ¿no significa eso que la película hizo su trabajo mejor que nadie?