Daredevil: Born Again rompe un récord que Marvel preferiría olvidar

Aunque prometía ser un bombazo, en su primera temporada, Daredevil: born again ha batido una marca que nadie quería alcanzar

La vuelta de Daredevil al MCU apuntaba alto. Con Charlie Cox recuperando el traje rojo y Vincent D’Onofrio rugiendo de nuevo como Kingpin, la serie Daredevil: Born Again llegaba a Disney+ como uno de los estrenos más esperados del año. Sin embargo, el entusiasmo inicial no se ha traducido en cifras contundentes. De hecho, ha marcado un hito bastante incómodo para Marvel Studios.

El reto de reconquistar a la audiencia

En sus primeros cinco días, la serie alcanzó 7,5 millones de visualizaciones, lo cual suena decente… hasta que se compara con otros títulos del universo. Loki Temporada 2, por ejemplo, acumuló 10,9 millones en solo tres días, y Agatha All Along logró 9,3 millones en una semana. Lo peor: según ComicBook.com, Daredevil: Born Again se ha convertido en la primera serie live-action de Marvel que no entra en el Top 10 de Nielsen entre las producciones originales de streaming. Un récord… pero no del tipo que se celebra.

¿Qué ha fallado en el regreso de Matt Murdock? Para muchos fans, la respuesta está en la dirección creativa inicial, el tono irregular de los primeros episodios y un ritmo más lento del que esperaban. Pese a que la campaña de marketing apelaba a la nostalgia de la serie de Netflix, el resultado final no ha convencido a todo el mundo, especialmente a quienes buscaban la intensidad de los combates de antaño o tramas más centradas en la oscuridad legal y callejera de Hell’s Kitchen.

Pero no todo está perdido. Daredevil: Born Again cuenta con una ventaja importante: tendrá una segunda temporada, algo que muchas otras series de Marvel no han conseguido. Con un encargo original de 18 episodios, Marvel Studios parece confiar en que la serie encontrará su equilibrio con el paso del tiempo.

Lo que viene pinta mucho mejor

La segunda temporada ya está en producción y recuperará a varios personajes clave de la etapa de Netflix que brillaron por su ausencia en los primeros capítulos. Entre ellos, Karen Page (Deborah Ann Woll) y Foggy Nelson (Elden Henson), que regresan para acompañar a Matt en la batalla por la ciudad… y por su alma.

Además, Bullseye (Wilson Bethel) promete ponerle las cosas difíciles a Daredevil, mientras que personajes nuevos como BB Urich (Genneya Walton), Cherry (Clark Johnson) o Daniel Blake (Michael Gandolfini) expanden el universo urbano de la serie. Y sí, el Castigador vuelve: Jon Bernthal se enfunda otra vez la calavera como Frank Castle.

Pero el mayor bombazo es la confirmación de Krysten Ritter como Jessica Jones, abriendo así la puerta al ansiado reencuentro de los Defensores. Los rumores sobre la vuelta de Luke Cage (Mike Colter) y Iron Fist (Finn Jones) están más vivos que nunca, y si se confirma, podríamos estar ante un evento a la altura de lo que fue The Defenders en 2017.

Mientras tanto, el fandom cruza los dedos para que Born Again no repita la tibia recepción de su primer acto y consiga levantar el vuelo en 2026, cuando la segunda temporada aterrizará en Disney+.

Un héroe de calle con historia de altibajos

Daredevil ha tenido una relación complicada con el éxito mainstream. Aunque su versión de Netflix fue un hit entre el público más fiel, nunca llegó a tener la visibilidad de los Vengadores o de Loki. Sin embargo, su carácter más adulto, su estilo crudo y su realismo callejero han hecho que mantenga una base de fans muy entregada.

Ese tono tan marcado es justo lo que muchos echan de menos en esta nueva etapa. Born Again se ha debatido entre conservar ese espíritu o adaptarse al molde más “Disneyficado” del MCU. El resultado ha sido una mezcla que no termina de cuajar, pero que aún tiene margen para encontrar su identidad.

¿Podrá redimirse Daredevil?

La temporada 2 podría ser el momento definitivo para que Marvel corrija el rumbo. El regreso de rostros conocidos, el potencial de un crossover con los Defensores y la tensión creciente entre Daredevil y Kingpin, ahora en su versión como alcalde de Nueva York, apuntan a una narrativa con más peso político y emocional.

Con todo esto en el horizonte, Born Again aún puede convertirse en la historia de redención que su nombre sugiere. Pero para lograrlo, tendrá que apostar fuerte por lo que hizo grande al personaje… y no tener miedo de volver a mancharse las manos en las calles de Hell’s Kitchen.