Marvel reinicia el viaje del Dios del Trueno con una identidad totalmente nueva y un mundo donde los dioses nunca existieron
¿Qué pasaría si todo lo que sabías sobre Thor fuera mentira? No, no hablamos de una nueva línea alternativa ni de un What If…? cualquiera. Hablamos de Thor #1, el reinicio que nos propone Al Ewing junto al arte espectacular de Pasqual Ferry, y que promete sacudir los cimientos de más de 60 años de historia del personaje.
Porque sí, Thor ha muerto… y ha vuelto, pero no como lo conocíamos. Según la premisa que nos deja con más preguntas que respuestas, despierta como un hombre con un martillo en un mundo donde Asgard jamás existió. Ni Odin, ni los Nueve Reinos, ni siquiera las leyendas nórdicas. Todo era un cuento. Pero entonces… ¿quién es este nuevo Thor?
Una historia que empieza donde otras acaban
La etapa anterior, Immortal Thor, concluye en el número #25 con una batalla final de tintes apocalípticos. Thor se adentra en Vidblainn, un reino de los muertos del que no se vuelve, y allí se enfrenta al Gran Serpiente… que lleva su propio rostro. Una escena que parece salida de un poema épico y que marca su aparente final. Pero Ewing no ha hecho más que empezar.
“Desde el primer número de Immortal Thor, Thor ha estado enfrentándose al final de su historia… pero eso solo era el final del primer acto”, avisa Ewing. Y con ese cierre tan potente, el número #1 de esta nueva serie llega con todo el peso del mito… y la oportunidad de romperlo por completo.
¿Quién es ese hombre con un martillo?
Lo que Marvel ha soltado hasta ahora es un bombazo para cualquier fan del personaje: “En alguna parte de la ciudad… un hombre está despertando. Un hombre con un martillo”. Así de simple. Así de potente. Un nuevo comienzo desde cero en un mundo que nunca oyó hablar de dioses nórdicos, ni de Midgard, ni de los Avengers enfrentándose a Thanos. Aquí la mitología es solo ficción, y nadie va a salvarnos… salvo quizás este misterioso personaje.
La idea, aunque radical, recuerda a los inicios del Thor clásico cuando era Donald Blake, el médico que encontraba el martillo y al golpearlo se transformaba en el Dios del Trueno. Pero Al Ewing no es de reciclar ideas sin más. Esta nueva identidad promete algo más profundo: una reinvención del mito desde su ausencia, una historia donde el héroe no parte del poder, sino de la confusión y la búsqueda.
Un equipo creativo de altura
Acompañando a Ewing está el artista Pasqual Ferry, quien ya dejó huella en etapas anteriores de Thor junto a Matt Fraction. Su regreso al personaje se percibe como una declaración de intenciones: si vas a rehacer a Thor, hazlo con alguien que sepa manejar el equilibrio entre lo humano y lo divino con el pincel. Y ojo, porque Alex Ross se encarga de la portada, lo que siempre es sinónimo de evento.
Thor sin Asgard: ¿reinicio o declaración de guerra a la continuidad?
La decisión de eliminar Asgard de la ecuación no es solo valiente, es también arriesgada. ¿Cómo se construye un Thor sin mitología? ¿Puede ser Thor sin los otros dioses, sin Loki, sin Sif o sin los Eternos que han ido cruzando su camino?
Para Ewing, esta ruptura es una oportunidad para cuestionar lo que hace a Thor ser Thor: ¿Es su divinidad? ¿Su linaje? ¿O simplemente la decisión de luchar por la justicia aunque todo lo demás desaparezca?
La historia se prepara para explorar temas más existenciales, quizás incluso espirituales, en un tono que recuerda más a The Sandman que a los clásicos de superhéroes. Una tierra sin dioses, un héroe sin memoria, y un martillo que, aunque siga siendo un símbolo, puede que no invoque el trueno, sino otra cosa completamente distinta.
¿Qué esperar de Thor #1?
La sinopsis oficial nos adelanta que será el inicio de una “leyenda nueva”, lo que sugiere que Marvel quiere atraer tanto a lectores veteranos como a nuevos. El número saldrá a la venta el 27 de agosto de 2025, y justo antes, el 2 de julio, Immortal Thor #25 revelará los detalles de esta transición final entre el viejo dios y el nuevo hombre.
Para los que buscan respuestas, este nuevo arco es una promesa en forma de misterio. Para los que buscan mitología, lo que van a encontrar es su ausencia… y en ese vacío, una historia que podría convertirse en algo mucho más grande.
