Un error inesperado revela lo que muchos temían, la inteligencia artificial se cuela en los subtítulos de anime, pese a las promesas contrarias de la compañía
La polémica ha vuelto a tocar la puerta de Crunchyroll, y esta vez no tiene nada que ver con retrasos en emisiones ni censura. Lo que ha encendido la mecha de los fans ha sido algo mucho más delicado: el uso de inteligencia artificial para traducir subtítulos, concretamente ChatGPT. Y sí, no hablamos de una teoría conspiranoica, sino de una evidencia bastante clara que ha dejado en shock a la comunidad otaku.
La metida de pata que delató a la IA
Todo estalló el 1 de julio de 2025, cuando se estrenó Necronomico and the Cosmic Horror Show, una serie de anime producida por Cygames. Un fan alemán encendió el episodio con subtítulos en su idioma y se topó con una joyita inesperada: “ChatGPT said: Wenn ich die Welt von hier an weiter genießen kann”, es decir, “ChatGPT dijo: Si puedo seguir disfrutando del mundo desde aquí”.
Esta frase aparecía tal cual, sin disimulo ni corrección. Y como era de esperar, las redes sociales ardieron. El usuario Pixel compartió la captura en Bluesky y rápidamente otros espectadores comenzaron a revisar subtítulos en diferentes idiomas. Aunque en inglés no se llegó a ver una frase tan descarada, sí se detectaron errores de traducción que apuntan a un posible uso de IA en otros idiomas.
“El nivel de dejadez y falta de atención es casi admirable”, comentaba un usuario indignado en la misma publicación. Otro se limitaba a decir: “Qué vergüenza. Ni usar bien ChatGPT han sabido”.
Promesas rotas… ¿y más casos por descubrir?
Lo más preocupante de este incidente es que Crunchyroll se comprometió públicamente a no usar IA en el proceso creativo, incluida la localización. En una entrevista con Forbes en abril de este mismo año, Rahul Purini, presidente de la plataforma, aseguró que “no están considerando el uso de inteligencia artificial en los procesos creativos”. Eso sí, reconocía que sí contemplaban su uso para mejorar recomendaciones y la experiencia de usuario. Pero nunca se mencionó que la IA pudiese encargarse de algo tan sensible como los subtítulos.
Este tropiezo reabre una pregunta muy seria: ¿cuántas otras series han sido traducidas con ayuda de IA sin que lo sepamos? Porque si no se detecta un fallo tan evidente como el de Necronomico, el proceso puede pasar desapercibido. Y eso, en un medio donde la precisión cultural y lingüística es crucial, es una auténtica bomba de relojería.
¿Qué significa esto para el futuro del anime subtitulado?
El uso de IA para traducir anime no es solo una cuestión de eficacia o costes. Es, ante todo, una decisión editorial con un impacto directo en la experiencia del espectador. Traducir no es solo convertir palabras de un idioma a otro: implica captar matices, referencias culturales y expresiones propias del medio. Algo que, por ahora, la inteligencia artificial no domina del todo.
Además, muchos temen que este sea solo el comienzo de una tendencia más amplia, donde los profesionales humanos sean sustituidos progresivamente por herramientas automáticas. Lo cual no solo afecta a la calidad de las obras, sino también al futuro laboral de traductores y adaptadores, figuras clave en el ecosistema del anime.
Hasta el momento, Crunchyroll no ha emitido ningún comunicado oficial sobre el incidente. Mientras tanto, los fans siguen preguntándose: ¿podemos confiar en los subtítulos que leemos?
El caso de Necronomico y la obsesión por la traducción rápida
Necronomico and the Cosmic Horror Show es una serie reciente con tintes de horror cósmico, inspirada en la obra de H.P. Lovecraft, pero con ese toque moderno y experimental tan típico de Cygames. El uso de IA en su traducción puede haber sido un intento de acelerar el estreno simultáneo global, pero el resultado ha terminado empañando su lanzamiento. La ironía no pasa desapercibida: una historia de horrores ancestrales traducida por una IA moderna que no distingue un pronombre de una preposición.
Mientras tanto, plataformas como Netflix, Disney+ o Prime Video se enfrentan al mismo dilema: ¿automatizar para reducir costes o mantener el toque humano que respeta la esencia de las obras? En el caso de Crunchyroll, la decisión (o el desliz) ha sido evidente, y los fans no están dispuestos a perdonar tan fácilmente.