Tras años siendo la cara de Iron Man, Downey Jr. cambia de bando y se pone la capa del dictador de Latveria. Y no solo será un rival de Los Vengadores, sino la figura que redefinirá el destino del universo marvelita en Avengers: Doomsday.
Un crossover sin precedentes
La película no solo traerá de vuelta a Thor (Chris Hemsworth) o al Capitán América de Anthony Mackie. También veremos a héroes más recientes como Shang-Chi, Shuri o incluso los integrantes de los Thunderbolts. Y por si fuera poco, se sumarán los nuevos Cuatro Fantásticos de First Steps.
El bombazo llega con la inclusión de varios mutantes clásicos. Desde Patrick Stewart retomando su papel de Charles Xavier hasta Alan Cumming como Nightcrawler, la cinta se perfila como la reunión definitiva de héroes y villanos de todos los rincones del multiverso.
Un matiz que ha dividido a los fans: mientras unos aplauden que se evite la caricatura, otros sienten que se pierde parte de la esencia del personaje. Habrá que esperar a diciembre de 2026 para ver cómo resulta en pantalla.
Comparado con otros enemigos clásicos como Thanos, Doom aporta un carisma diferente, más intelectual y estratégico. Su capacidad para manipular tanto en el campo de batalla como en la política lo distingue dentro del panteón de villanos marvelitas. Que Robert Downey Jr. lo interprete añade un peso dramático enorme, pues mezcla la nostalgia de Iron Man con la amenaza de uno de los rivales más legendarios de los cómics.
Marvel ha apostado por un cambio arriesgado, pero con el regreso de Downey Jr., el carisma de los mutantes y la unión de héroes de distintas generaciones, parece que el público tendrá razones de sobra para volver a llenar las salas.