Steven Moffat, exshowrunner de Doctor Who cree que la serie debe continuar pese a la incertidumbre
Una serie como patrimonio nacional
Lo que mantiene la expectativa en alto es el próximo spin-off The War Between the Land and the Sea, protagonizado por Gugu Mbatha-Raw y Russell Tovey, que se centrará en las aventuras de la organización militar UNIT. Moffat especula que las grandes decisiones sobre el futuro de la serie no se tomarán hasta después de que este proyecto llegue a la pantalla, lo que mantiene a los seguidores en una tensa espera.
Por su parte, Russell T Davies, actual showrunner, reconoció en junio que ni siquiera él tenía claro qué ocurriría a continuación, alimentando aún más la sensación de incertidumbre. Sin embargo, la BBC ha querido tranquilizar a los espectadores: “Doctor Who no va a irse a ninguna parte”, aseguró Kate Phillips, jefa de contenidos de la cadena, en el Festival de Televisión de Edimburgo.
Un símbolo que trasciende generaciones
Y es que pocas series pueden presumir de haber marcado tantas generaciones. Desde su regreso en 2005, el programa ha renovado su espíritu con cada regeneración del Doctor, convirtiéndose en un referente de la ciencia ficción televisiva y en un fenómeno global que sigue conquistando audiencias.
La importancia de Who en la cultura popular
El propio personaje del Doctor es uno de los elementos que más ha contribuido a la longevidad de la serie. Su capacidad de regenerarse no solo permite mantener fresco el relato con nuevas caras y estilos, sino que también lo convierte en un icono flexible que puede adaptarse a los cambios sociales y culturales de cada época. Desde la elegancia excéntrica de David Tennant hasta la frescura de Ncuti Gatwa, cada interpretación aporta matices distintos, consolidando al personaje como un verdadero símbolo de la televisión británica.
El peso de un legado
Mientras los espectadores esperan noticias concretas, la sensación general es que la TARDIS seguirá viajando. Quizás el camino sea incierto, pero la pasión que despierta la serie parece garantizar que, tarde o temprano, volveremos a escuchar el inconfundible sonido del motor del tiempo.


