James Bond renace en 007: First Light el juego que reescribe su origen

IO Interactive deja atrás los clichés del agente británico para explorar quién era James Bond antes del esmoquin y el Martini

“No queríamos ver cuántos píxeles podíamos dedicar a Pierce Brosnan”, admite Hakan Abrak, director creativo de IO Interactive, sobre el próximo videojuego 007: First Light. En una entrevista con Edge, el responsable del estudio danés explicó que el proyecto solo fue posible porque se concibió como una historia de orígenes, no como una adaptación cinematográfica más. “Si no hubiéramos tenido libertad para contar nuestro propio Bond, este juego no habría ocurrido”, aseguró.

Un Bond antes de ser Bond

IO Interactive, conocida por su aclamada saga Hitman, no quería limitarse a recrear un rostro famoso o repetir una fórmula conocida. “Nunca habríamos hecho una adaptación de película”, insiste Abrak. “Queríamos dejar nuestra huella en la historia y en el proceso creativo.”
Para el estudio, el interés está en explorar el viaje emocional de un joven que aún no es el agente 007, antes de los trajes elegantes y los gadgets imposibles.

Citando a Martin Emborg, director narrativo y cinematográfico del proyecto: “Todo el mundo sabe cómo Bond toma su bebida, cómo viste o qué conduce. Eso se vuelve superficial muy rápido. Si quieres contar una historia que conecte emocionalmente, eso no basta”. En su lugar, IO ha apostado por una narrativa que construya al personaje desde cero, mostrando el proceso de cómo un hombre común se convierte en el espía más famoso del mundo.

Una historia original de James Bond

Para IO Interactive, este enfoque era casi inevitable. El universo de Bond —con sus décadas de películas, novelas y reinterpretaciones según el actor— ofrecía la oportunidad perfecta para innovar. “Tenemos todo ese legado, lo que nos invita a encontrar nuestra propia versión”, explica Emborg. “Nunca tuvimos que preguntarnos si lo estábamos haciendo bien.”

El nuevo Bond tiene un rostro joven: Patrik Gibson, actor de Dexter: New Blood, interpretará al protagonista. Según el equipo, su condición de recién llegado refleja perfectamente el espíritu de esta historia: un agente inexperto, vulnerable y en formación. 007: First Light se inspira en todo el material previo —de Fleming a Craig—, pero sin copiar ninguno.

Abrak lo define como “una historia que podría existir dentro del canon de Bond, pero contada con una voz nueva”. Esa visión busca conectar tanto con los fans clásicos como con nuevos jugadores que nunca se sintieron identificados con el Bond más tradicional.

Un reto para nada minúsculo

El reto, claro, es mayúsculo. IO Interactive se enfrenta al legado de GoldenEye 007, uno de los juegos más icónicos de la historia. El propio Abrak reconoce: “Todo el mundo conoce GoldenEye, es legendario. Nuestro objetivo es hacer un título que pueda estar a la altura, aunque sea muy diferente de Hitman.”

Y esa diferencia parece ser precisamente su mayor fortaleza. Mientras Hitman siempre giró en torno al asesinato meticuloso y al disfraz, First Light se centrará en la construcción del mito, en la identidad y en las primeras misiones que definieron al futuro agente.

Un nuevo rostro para una leyenda del espionaje

En esta reinvención, Patrik Gibson aporta frescura y vulnerabilidad al personaje, alejándose del estereotipo del agente perfecto y carismático que todos conocemos. Su versión de Bond no es aún el ícono elegante del MI6, sino un hombre en conflicto con su deber y su moral, que apenas empieza a entender el peso de su nombre en clave. IO Interactive ha apostado por una interpretación emocionalmente más rica, donde los errores, la duda y la pérdida juegan un papel tan importante como la acción o la intriga.

Además, el estudio danés ha dejado claro que First Light no será un clon de Hitman, pese a compartir ADN creativo. Aunque mantiene el sigilo y la planificación estratégica, la historia se centrará más en las consecuencias de las decisiones del protagonista. Será un viaje de transformación, no solo un desfile de misiones espectaculares o gadgets imposibles.

Con un tono más personal y una narrativa cinematográfica, IO quiere romper con la imagen fría y distante del espía, presentando a un Bond humano, que duda, que falla, que todavía no sabe si está preparado para ser un héroe.

En un momento en el que las franquicias buscan reinventarse, 007: First Light apunta a redefinir la esencia de James Bond en el mundo del videojuego. No se trata de cómo agita su Martini, sino de por qué decidió alzarlo por primera vez.