La saga del Goliat Esmeralda cambia para siempre con la llegada del Infernal Hulk, una criatura más poderosa que nunca
Durante años, Hulk parecía imposible de matar. Desde que Marvel lo convirtió en un ser prácticamente inmortal allá por 2018, el coloso verde sobrevivió a todo tipo de amenazas. Sin embargo, esa era ha llegado a su fin: el Increíble Hulk ha muerto, y su desaparición ha liberado a un enemigo tan antiguo como aterrador, conocido como Infernal Hulk.
La muerte del monstruo inmortal
En los números recientes de la serie, escritos por Phillip Kennedy Johnson y dibujados por Nic Klein, la historia ha girado en torno a una entidad llamada la Madre de los Horrores, un ser cósmico que nació sin intervención del One Above All, el creador del multiverso Marvel. Esta criatura había engendrado dos hijos y planeaba dominar toda la realidad, hasta que fue confinada en el Below-Place, el nivel más bajo de la existencia.
El único de sus descendientes que logró escapar fue The Eldest, una cambiaformas que creció obsesionada con liberar a su madre. Convencida de que la clave estaba en el cuerpo del Gigante Esmeralda —cuya conexión con el One Below All le otorgaba su inmortalidad—, la criatura emprendió su cacería.
Infernal Hulk, el nacimiento de un nuevo monstruo
Todo culmina en The Incredible Hulk #30, cuando The Eldest, habitando el cuerpo de la Abominación, se enfrenta al Goliat Esmeralda dentro del Below-Place. En lugar de pelear, arranca el alma de Bruce Banner del cuerpo de Hulk, separando por completo a ambos. Esa ruptura provoca la muerte espiritual del héroe, dejando su cuerpo vacío y vulnerable ante su enemiga.
Pero el destino de Hulk no podía ser más macabro. Al descubrir que su madre había muerto en su prisión, The Eldest devora el cuerpo de la Madre de los Horrores, fusionando su poder con la fuerza física del monstruo verde. Así nace el Infernal Hulk, una amalgama de odio, locura y poder cósmico. El narrador lo resume con una frase escalofriante: “El One Below All se ha ido… junto con la Madre de los Horrores. Todo lo que queda… es Hulk.”
El legado oscuro del One Below All
Para los lectores veteranos, el One Below All ha sido uno de los conceptos más inquietantes del universo Marvel. Este ser, opuesto al One Above All, representa el núcleo mismo de la rabia, la destrucción y la desesperanza. Era también la fuente que convertía a Hulk y otros mutantes gamma en entidades inmortales. Ahora que ha desaparecido, esa inmortalidad se ha roto, dejando a Bruce Banner tan vulnerable como cualquier humano.
Sin embargo, su mente sigue activa. Aunque su cuerpo ha sido destruido, Banner sobrevive, dispuesto a enfrentar al monstruo que lleva su poder, pero no su humanidad. Marvel ya ha anunciado que esta historia continuará en una nueva colección titulada Infernal Hulk, que debutará en noviembre de 2025.
El regreso del horror en Marvel Comics
Con Infernal Hulk, la editorial promete una nueva etapa de horror cósmico dentro del universo Marvel. El nuevo villano buscará “revivir el antiguo mundo de las pesadillas” y convertir a los héroes en bestias, reescribiendo las reglas del poder gamma y del miedo. El tono recuerda a las sagas más oscuras del personaje, como Immortal Hulk de Al Ewing, pero con una escala aún más apocalíptica.
Los fans del cómic clásico del Gigante Esmeralda encontrarán aquí una mezcla entre terror metafísico y tragedia existencial, con una dosis de acción brutal marca de la casa. Marvel parece dispuesta a explorar una versión demoníaca del héroe que una vez simbolizó la rabia contenida de la humanidad.
El final de Hulk… o un nuevo comienzo
El cierre de The Incredible Hulk #30 deja claro que el mito del héroe ha cambiado para siempre. El Gigante Esmeralda ha muerto, pero algo peor ocupa su lugar. Pero su versión infernal promete ser una serie que no solo redefina el legado del personaje, sino que abra la puerta a una nueva etapa de horror dentro del cómic de superhéroes.
Con esta jugada, Marvel vuelve a demostrar su habilidad para reinventar a sus iconos, transformando una historia de fuerza y redención en una pesadilla cósmica donde el monstruo interior finalmente gana la batalla.


