Marvel Rivals le da a Spider-Man un apodo que nadie vio venir
Spider-Man y el simbionte Kerfuffle
Durante la tercera temporada de Marvel Rivals, titulada The Abyss Awakens, la historia enfrentó la Fuerza Fénix contra los simbiontes de Knull, el dios oscuro del abismo. En este caos cósmico, varios héroes fueron infectados por simbiontes… incluido Spider-Man.
Y aunque todo surgió como una ocurrencia divertida, Marvel parece haberlo tomado bastante en serio dentro del peculiar multiverso de Marvel Rivals.
El simbionte perfecto para el trepamuros
El término “kerfuffle” significa algo así como jaleo, lio o alboroto. ¿Y hay algo que describa mejor a Spider-Man? Peter Parker siempre ha sido el héroe que atrae los problemas sin buscarlos, el tipo que se mete en embrollos por hacer lo correcto y que no puede evitar soltar un chiste en mitad de una pelea contra el Duende Verde.
Además, a diferencia del simbionte original que acabaría convirtiéndose en Venom junto a Eddie Brock, este nuevo traje negro no está ligado a los conflictos más oscuros del personaje. Aquí, Spider-Man se une a un simbionte nuevo creado exclusivamente para el evento de Marvel Rivals, una oportunidad ideal para aportar un tono más ligero y experimental.
Una nueva faceta simbiótica para Spider-Man
Aunque Marvel Rivals y su cómic asociado no formen parte del canon principal de Marvel, la idea de darle a Peter un nombre simbiótico propio tiene algo de poético. Durante años, los fans han visto desfilar una legión de simbiontes con nombres imponentes —Riot, Scream, Phage, Lasher, Sleeper— mientras el primero de todos, el héroe que empezó la historia del traje negro, nunca tuvo uno.
Kerfuffle viene a llenar ese vacío con humor y personalidad, algo que encaja mucho más con el espíritu del personaje que cualquier intento “oscuro” por hacerlo más intimidante.
El valor simbólico del nombre
Y lo curioso es que Kerfuffle no es solo una broma interna: refleja cómo Marvel ha aprendido a reírse de sí misma, abrazando la autoironía que define a personajes como Spider-Man. En un universo repleto de tragedias cósmicas y guerras multiversales, un nombre tan cómico es casi un acto de resistencia.
Un legado que se reinventa
Spider-Man, al final, siempre ha sido el personaje que logra equilibrar humor, tragedia y humanidad como ningún otro. Y si ahora tiene un simbionte propio llamado Kerfuffle, solo queda decir una cosa: que empiece el jaleo.


