Lo interesante es que “Royale” podría ser solo un juego interno del estudio, un guiño para quienes conocen la historia original, o un aviso elegante de que Doom será tan “real” como “real” su realeza en Battleworld. La propia trama del cómic coloca al villano como amo absoluto de un mundo remendado a base de universos rotos, así que sería raro que Marvel no aprovechara ese simbolismo para el rodaje. No sería la primera vez que los nombres en clave de producción anticipan el tono, la escala o incluso las sorpresas del guion.
En cualquier caso, el estreno sigue en el horizonte: Avengers Secret Wars llega el 17 de diciembre de 2027, un año después de Avengers Doomsday, programada para diciembre de 2026. Y si Marvel está afinando la maquinaria ya mismo, es porque el reparto que están reuniendo necesita una alfombra roja más larga que la de los Oscar.
Y por si esto no hubiese explotado ya la escala necesaria, llegan los mutantes clásicos del cine: Patrick Stewart (Xavier), Ian McKellen (Magneto), Alan Cumming (Nightcrawler), Rebecca Romijn (Mystique), James Marsden (Cyclops) y Channing Tatum (Gambit), que por fin podrá decir que ha interpretado al personaje después de una década de retrasos, cancelaciones y dramas de despacho.
La fase actual del MCU necesita un golpe de autoridad, y Secret Wars es precisamente la carta que puede reiniciar, ajustar o reordenar absolutamente todo. Y si el guiño se confirma, Royale no es una casualidad: es una advertencia elegante.