Hit-Girl en Hollywood: Kevin Smith y Pernille Ørum enfrentan a la diminuta asesina con los capitostes del cine y con sus viejos enemigos de los Genovese, en la cuarta entrega de su justiciero tour por el mundo.
El afamado guionista de cómics Mark Millar, que ha trabajado para editoriales tan importantes como Marvel y DC, fundó en 2004 compañía Millarworld, destinada a publicar todas las novelas gráficas de su propia creación, entre las que podemos destacar obras tan conocidas como Wanted (2003 – 2004), The Unfunnies (2004 – 2007), War Heroes (vigente desde 2008), Chosen (2009), Némesis (2010) o Kick Ass (2008 -2014).
El éxito obtenido por el último título mencionado, tanto en formato de papel como en su versión cinematográfica, fue de la magnitud necesaria para que se considerase rentable llevar a cabo un spin-off protagonizado por Hit-Girl. Después de un tomo en solitario, cuya acción transcurre entre los dos primeros volúmenes de Kick Ass, la joven y letal Mindy logró hacerse con una colección propia, vigente desde 2018, entre cuyos títulos podemos destacar Hit-Girl en Canadá, Hit-Girl en Colombia, Hit-Girl en Hong Kong, Hit-Girl en Roma o Hit-Girl en Hollywood, de la que ya hablamos en su momento, que es el título que analiza este artículo, cuya portada puedes ver bajo este párrafo.
Según nos cuenta la trama, dividida en cuatro capítulos, cuando Mindy descubre que Hollywood está rodando una película, basada en ella, que se aprovecha de su tragedia personal, decide hacer una visita nada amistosa al director del filme. Sin embargo, cuando lo encuentra, descubre que alguien le ha pegado una paliza y le ha cortado el pene. Lo peor de todo es que Hit-Girl es la principal sospechosa. La cosa se complica aún más para Mindy cuando una persona relacionada con su pasado aparece en escena.
Puede que Hit-Girl en Hollywood sea el cómic más especial que se haya hecho nunca sobre el personaje, ya que se aleja un poco de la temática de llevar a cabo una misión, en nombre de la justicia, para centrarse más en el oscuro pasado que llevó a una joven niña a convertirse en Hit-Girl.
Merece la pena mencionar a personajes como Kick-Ass, Big Daddy o Red Mist, que hacen acto de presencia, por medio de los actores que los interpretan en la película que, a su modo, Hollywood está rodando sobre Hit-Girl, consiguiendo que los lectores rememoremos el volumen original de Kick-Ass.
Un dato curioso lo encontramos en el primer capítulo de la historia, el cual, aparte de efectos de sonido y textos de lectura, carece casi por completo de texto, con la excepción de la penúltima página, en la que se menciona la frase más icónica de la película El sexto sentido (1999). Dado que la mayor parte de la trama trascurre en Hollywood, no es de extrañar que nos encontremos más referencias cinematográficas a lo largo del tomo.
Pese a que Mark Millar y John Romita Jr., los creadores del personaje, no han participado en Hit-Girl en Hollywood, el espíritu de la protagonista y el aspecto visual de la aventura, con toda su crudeza no apta para niños y mentes sensibles, logran que Kevin Smitn y Pernille Ørum se conviertan en dignos sucesores de los autores originales.
Da igual que seas fan o no de la primera novela gráfica de Kick Ass o de su versión cinematográfica. Tampoco importa si no has conocido este universo hasta la aparición de la colección en solitario de Hit-Girl. En cualquiera de esos casos, disfrutarás de la lectura de este tomo, el cual te dejará con ganas de más.
Panini Comics publica el tomo de Hit-Girl en Hollywood junto al al resto de la colección
Hit-Girl en Hollywood se completa con la biografía de los autores y cuatro de portadas alternativas.
Este tomo está correctamente publicado por Panini Comics, en formato de tapa dura y a todo color. Sus medidas son 18 x 27,5 centímetros, consta de 112 páginas y su precio es de 15 euros.
Kevin Smith es conocido sobre todo por la saga cinematográfica que inició con Clerks (1994). Ni siquiera un ataque al corazón, que casi le costó la vida, le impidió llevar a cabo la película que considera su obra maestra: Jay and Silent Bob Reebot (2019). Se ve a sí mismo como un polígamo, porque dice estar casado con su esposa Jen y con el podcasting.
Pernille Ørum, residente en Dinamarca, ilustra y diseña personajes de manera independiente. En 2011, se licenció en Animación de personajes por medio de The Animation Workshop. Tras trabajar en ese mundillo, en Irlanda y Reino Unido, regresó a Dinamarca, donde se centró en el diseño de personajes. Su trabajo se ha dejado ver en empresas como Nickelodeon Jr., Mattel Dreamworks y Disney Publishing. Los diseños de los personajes de la serie DC Super Hero Girls (vigente desde 2019) le pertenecen.
Sunny Gho cursó sus estudios de Diseño Gráfico en la Universidad de Trisakti, en Indonesia, para acabar trabajando en editoriales como Top Cow, Imaginary Friends Studios y Glitch. Super Crooks (2012), Superior, The Indestructible Hulk (ambos en 2013), The Avengers (2013 – 2018), Marvel’s Civil War II (2015), Jupiter’s Legacy 2 (2018) y, por supuesto, Kick Ass (2017 – 2018) son algunas de las obras en las que ha trabajado como colorista, para Mark Millar en las cuatro ultimas obras mencionadas.
Melina Mikulic, nacida en Zagreb (Croacia), se sacó un Master en Humanidades y se graduó en la Facultad de Diseño. Entres los más de mil volúmenes que ha diseñado destacan Persépolis (2012) de Marjane Satrapi y Fibra (2012 – 2014) de Moebius y Tezuka. Principalmente centrada en diseños de impresión, poco a poco va fijando su interés en la ilustración y los medios interactivos. Actualmente, vive en Rijeka.
Rachael Fulton se ha encargado de la edición de Kick Ass: La chica nueva (vigente desde 2019) y de toda la saga de Hit-Girl. Como editora de la división del Millarworld para Netflix, se está encargando de producir proyectos como The Magic Order (cancelada antes de su estreno), Prodigy, Space Bandits, Sharkey, cazarrecompensas y Crononautas 2. En su twitter @Rachael_Fulton habla de feminismo, de cómics y de gatos.
¡Luces! ¡Cámara! ¡Acción! Un estudio de Hollywood está tergiversando la vida de Hit-Girl para adaptarla a la pantalla grande, dramatizando la muerte de Big Daddy para hacer su película más comercial.
Mindy necesita hundir esa película y rápido.
Todo el mundo sabe que si quieres matar a una serpiente, le has de cortar la cabeza. Así que, Mindy se dirige al nido de víboras de Hollywood: La Torre Negra.
