Con los 4 Fantásticos de camino al UCM, el Devorador de Mundos aparecerá tarde o temprano y Marvel podría aprovechar a los Celestiales para explicarlo
En Eternals también se ha establecido que el flujo de vida en la galaxia se debe en gran medida a las acciones de los Celestiales. Durante eones, estos seres han creado galaxias, planetas y la vida que aparece en ellos. Sin embargo, estos planetas también sirven de sustento para que nazca un nuevo Celestial. Así, cuando el planeta muere pueden nacer innumerables más, continuando el ciclo. Sin embargo, cuando los Eternos mataron a Tiamut en la Tierra, se produjo una interrupción en ese flujo.
Ahora, miles de millones de planetas potenciales no serán creados, y una cadena de suministro de sustento y la continuación de la especie Celestial ha recibido un golpe importante. Esto también podría despertar a un antiguo Celestial, Galactus, que se mantuvo al margen gracias al flujo de energía procedente de la creación de mundos.
Ahora, hambriento y necesitado de la cantidad adecuada de energía, recorre la galaxia en busca de un heraldo que consiga nuevos mundos para consumir, pero como el actual grupo de Celestiales lleva tanto tiempo al mando, su presencia también perturba su gobierno, convirtiéndolo en amigo de nadie y enemigo de casi todos los seres vivos de la galaxia.
Al hacer de Galactus un Celestial aún más antiguo que el que vimos en Eternals, también podría tener acceso a tecnologías más antiguas, siguiendo los diseños del creador Jack Kirby, lo que le permitiría extraer los recursos de la Tierra para sí mismo. Como resultado, se convertiría en algo visualmente más clásico que los Celestiales actuales, a la vez que sería más fuerte debido al antiguo poder cósmico que lo alimenta.
