Crítica de The Last of Us
Por fin llega a nuestras pantallas la esperadísima adaptación de uno de los videojuegos más populares y queridos, The Last of Us (37 millones de copias vendidas). Este próximo lunes 16 de enero HBO Max nos llevará a un mundo post apocalíptico que muchos ya conocemos. Nosotros hemos podido ver el primer episodio y te contamos lo que te vas a encontrar y lo haremos, como siempre, sin spoilers de ningún tipo.
The Last of Us: De la consola a la televisión
Como ocurre siempre en estos casos, cuando se anuncia que se va a adaptar un videojuego a la pantalla (ya sea grande o pequeña), lo primero que sentimos los fans es alegría y expectación para, acto seguido, tener miedo. Miedo de que no la sepan adaptar como se merece, y es que la historia del cine y la televisión está llena de pésimas obras (os recomiendo ver la tercera temporada de Mythic Quest, donde uno de los temas que tratan es éste, con su genial sentido del humor).
El caso es que se ha intentado llevar The Last of Us a la pantalla casi desde su aparición en junio de 2013 (para PlayStation 3), sobre todo tras su exitosa secuela The Last of Us 2. Sam Raimi fue uno de los directores que estuvo a punto de encargarse de ello…
Por fin se decidió hacer una serie cuyo rodaje comenzó en julio de 2021, terminando casi un año después (con un gran presupuesto, todo sea dicho). El guionista y productor principal de la serie es Craig Mazin, creador de la exitosa serie Chernobyl. Junto a él, y como garantía de fidelidad al juego, tenemos nada menos que a Neil Druckmann, guionista y director creativo de The Last of Us (y responsable, entre otras, de Uncharted 2: Among Thieves) quien, además, ha dirigido uno de los 10 capítulos de los que se compone esta primera temporada.
Mención especial merece Gustavo Santaolalla, el compositor de la música del videojuego y que también se encarga de la BSO de la serie impregnándola de una melancolía que nos ayuda a identificarnos con los protagonistas. Esto, unido a otros detalles como que en algunos países como España se haya elegido para el doblaje a los mismos actores y actrices que han doblado el videojuego, nos aclaran la gran preocupación de HBO Max por conseguir un resultado lo más parecido posible al original.
Y digo lo más parecido posible porque (y ya estamos con el debate), esto es una adaptación: tanto el medio (televisión) como el público son diferentes y esto hace que el mensaje (tanto en fondo como en forma) sea ligeramente diferente en algunos aspectos. Si bien Mazin ha afirmado varias veces que los cambios hechos para la serie están aprobados por el mismísimo Druckmann, no menos cierto es que en algunos casos han tenido que plegarse al público objetivo, un público más generalista que el del juego.
Por ejemplo, se ha recortado la violencia, tanto en cantidad como en grado. Como el propio Druckmann afirmó, esa violencia extrema del videojuego era esencial para que el jugador conectara con Joel, “viendo el mundo a través de sus ojos”. Ahora, al cambiar de formato y de lenguaje, se ha dejado solo la “violencia esencial” para que los espectadores vivan la misma historia pero desde un punto de vista diferente: “ves la reacción de las personas ante ella (la violencia), eso la hace más aterradora”, vuelve a decir el creador del juego.
Pero que se haya reducido la violencia no significa que se haya eliminado, en absoluto. Y eso lo vemos desde el primer capítulo.
Crítica de The Last of Us, episodio 1
Vamos al lío. Este primer capítulo de la serie (de 85 minutos de duración) es simplemente alucinante, tanto como piloto de una serie como adaptación del videojuego.
Comenzamos como en el juego, con Sarah como principal protagonista. Incluso tenemos una secuencia en la que lo vemos en primera persona, dando la sensación de que estamos jugando y nos encontramos inmersos en la aventura.
Obviamente, si ya conoces este mundo captarás todos los guiños pero, además, la ambientación hará que te traslades inmediatamente a cuando tenías el pad en tus manos: los escenarios, la música, los diálogos, las voces… todo está cuidado para que revivas lo que jugaste.
Pero lo mejor es que si no has jugado nunca y es la primera vez que entras en el mundo de The Last of Us tampoco tendrás ningún problema. Desde el principio queda clarísimo todo lo que importa para que entiendas lo que ocurre en este 2023 posapocalíptico (aunque la serie estará salpicada de flashbacks que revelan hechos importantes). No te hará falta nada más que estar frente a la pantalla para quedar atrapado por la trama. De esta manera, la oscura odisea de Joel y Ellie que comienza aquí, conserva todo lo bueno del videojuego y lo expande para llegar a un público mucho más amplio.
Pero ¿de qué va The Last of Us? Pues 20 años después de que la civilización moderna haya sido destruida, Joel, un superviviente nato, es contratado para sacar de contrabando a Ellie, una niña de 14 años, fuera de una opresiva zona de cuarentena. Lo que comienza como un pequeño trabajo pronto se convierte en un viaje brutal y desgarrador, ya que ambos deben atravesar los EE. UU. y depender el uno del otro para sobrevivir.
Joel y Ellie: Pedro Pascal y Bella Ramsey
En este oscuro viaje nuestros guías (Joel y Eliie) están interpretados por Pedro Pascal y Bella Ramsey, quienes hacen una magnífica interpretación, llena de humanidad y de vulnerabilidad. Pascal nos muestra que es un actor más que respetable cuando muestra el dolor de una trágica pérdida. Pero, además, también nos muestra más facetas de la personalidad de este superviviente, castigado y endurecido por la vida.
De Ellie (Bella Ramsey), vemos bastante menos en este primer episodio, pero lo suficiente como para reconocer al personaje y ver el potencial que tiene. Según avance la temporada la iremos conociendo mejor, en su personalidad (y lo que ha vivido), además de que el espectador irá de su mano descubriendo este mundo.
En cuanto a los efectos especiales no tendréis queja. HBO se ha preocupado de plasmar a los infectados de forma muy fiel y, lo que es más importante, mostrando todo lo peligrosos que pueden ser.
Como digo, el episodio está plagado de guiños, huevos de Pascua y cameos (algunos de los cuales sacaron aplausos de los fans que estábamos en el preestreno), pero también tendremos momentos nuevos o historias que se insinúan en el juego y que vemos aquí más desarrolladas.
The Last of Us es una historia de supervivencia en un mundo posapocalíptico con zombies (chasqueadores o clickers los llaman), pero también es mucho más: trata de relaciones íntimas entre los protagonistas, de cómo aprenden a confiar el uno en el otro, ejemplificando lo que el ser humano debe hacer en un escenario como éste; trata de cómo reaccionaríamos a una catástrofe de este tipo (como ocurre en Walking Dead, el cómic de Kirkman), tanto a nivel personal como a nivel de sociedad…
En resumen, este primer episodio de The Last of Us nos promete una adaptación de un videojuego como muy pocas veces hemos visto: fiel pero que enriquece al original, manteniendo la historia. Sabiamente, porque es muy buena, tanto que más que un juego, The Last of Us ya era una excelente película. Y la serie está bien narrada, haciendo un producto que será atractivo tanto a jugadores como a neófitos televidentes, con unas muy buenas interpretaciones y una música y ambientación inigualables.