El actor, Vin Diesel, ha sido denunciado por su exasistenta, Asta Jonasson, por agresión sexual durante el rodaje de la quinta entrega de Fast & Furious
En un giro sorprendente y perturbador, Vin Diesel, conocido por su papel de Dominic Toretto en la saga “Fast & Furious”, enfrenta serias acusaciones. Asta Jonasson, exasistenta del actor, ha presentado una demanda en Los Ángeles, alegando que Diesel cometió agresión sexual contra ella en 2010. Estos eventos, supuestamente ocurridos en una suite del hotel St. Regis, han conmocionado a la industria y a los fans por igual.
Agresión en Hollywood: Un relato estremecedor
Asta Jonasson, graduada reciente de una escuela de cine, fue contratada por la empresa de Diesel, One Race, para trabajar en la producción de “Fast Five” en Atlanta. Sus tareas incluían organizar fiestas y acompañar a Diesel, garantizando su imagen pública, especialmente en ausencia de su novia de largo plazo.
La demanda describe una noche de septiembre de 2010, cuando Jonasson fue convocada a la suite de Diesel en el St. Regis. Según el relato, después de que Diesel hubiera pasado la noche con varias anfitrionas, agarró a Jonasson por las muñecas y la forzó sobre la cama. A pesar de sus súplicas, Diesel continuó con su comportamiento inapropiado, llegando a tocarla indebidamente y exponiéndose ante ella.
Reacciones y denegaciones
Bryan Freedman, abogado de Diesel, ha negado rotundamente las acusaciones, calificándolas de “absurdas” y destacando la falta de evidencia previa sobre estas afirmaciones, que datan de hace más de 13 años. Sin embargo, el impacto de estas alegaciones en la carrera y la percepción pública de Diesel aún está por verse.
No es la primera vez que Jonasson enfrenta situaciones inapropiadas durante su empleo con One Race. Otro incidente relatado en la demanda involucra a un supervisor diferente, quien también habría actuado de manera inadecuada con ella.
Las ramificaciones legales
La demanda de Jonasson incluye múltiples cargos, desde agresión sexual hasta discriminación de género, creando un ambiente laboral hostil y terminación injusta. Estos hechos, supuestamente encubiertos, han salido a la luz gracias a leyes como el Speak Out Act y la AB2777 de California, que alientan a las víctimas a romper el silencio.
A pesar de estos desafíos, Jonasson continuó su carrera en la industria del entretenimiento, desempeñándose en varios roles. Diesel, por su parte, ha sido una figura clave en Hollywood, no solo como actor sino también como productor.
Este caso no solo pone a prueba la reputación de Vin Diesel, sino que también plantea preguntas importantes sobre la cultura de Hollywood y la seguridad en el ambiente de trabajo. Mientras la industria y los fans siguen atentos, el resultado de esta demanda podría tener implicaciones de gran alcance, tanto para Diesel como para el panorama general del entretenimiento.
Otros juicios que han conmocionado a Hollywood
En la última década, Hollywood ha sido escenario de múltiples juicios de alto perfil que han puesto de manifiesto cuestiones de conducta inapropiada y abuso de poder entre algunas de sus figuras más reconocidas.
Uno de los casos más resonantes fue el de Harvey Weinstein, el magnate de Hollywood. En 2020, Weinstein fue condenado por agresión sexual y violación en un juicio que marcó un hito en el movimiento #MeToo. Su condena fue una señal clara de que incluso las figuras más poderosas de la industria no están por encima de la ley.
Otro caso notable fue el del actor Kevin Spacey. Acusado por múltiples hombres de agresión sexual, Spacey enfrentó tanto acusaciones penales como civiles. Aunque algunos casos fueron desestimados, la controversia dañó significativamente su carrera y reputación.
En 2021, Danny Masterson, conocido por su papel en “That ’70s Show”, fue llevado a juicio por tres cargos de violación. Estas acusaciones, relacionadas con incidentes de principios de los 2000, resaltaron las dificultades que enfrentan las víctimas al denunciar agresiones sexuales años después del hecho.
Estos juicios, incluyendo el de Vin Diesel, no solo cuestionan a las figuras individuales involucradas, sino que también desafían la cultura de silencio y complicidad que a menudo ha prevalecido en Hollywood. Estos casos han impulsado un cambio significativo en cómo la industria y el público abordan las acusaciones de abuso y mala conducta sexual.