Descubre la vida y legado de Bryan Ansell, co-creador de Warhammer y figura clave en Games Workshop
Bryan Ansell, conocido principalmente como co-creador de Warhammer y fundador de Citadel, la división de miniaturas de Games Workshop, falleció en su hogar rodeado de su familia el 30 de diciembre de 2023 a los 68 años. Su partida marca el fin de una era en el mundo de los juegos de estrategia y miniaturas, dejando tras de sí un legado inigualable en la industria.
Ansell, más allá de ser un nombre prominente en la empresa, fue una figura revolucionaria en el mundo del wargaming. En 1978, en una época donde Games Workshop distribuía y apoyaba juegos de rol en Europa, Ansell fundó Citadel para complementar esta oferta con miniaturas. Esta iniciativa fue el germen de lo que más tarde se convertiría en Warhammer Fantasy Battle, un juego que no solo aprovechaba la línea de miniaturas de Citadel sino que también redefiniría el género del wargaming.
La evolución de Warhammer y el ascenso de Ansell
Bajo la dirección de Ansell, la nueva marca no solo se convirtió en un éxito comercial, sino que también fue una revolución creativa. Ansell, con su visión única, llevó a Games Workshop a centrarse completamente en el hobby del wargaming de mesa, sector que aún domina en la actualidad. Fue responsable de diseñar Laserburn en 1980, un wargame de ciencia ficción que sentaría las bases para el 40K, incorporando elementos como las armas de pernos y la armadura de poder.
Como autor, Ansell contribuyó significativamente a la creación y el desarrollo de este complejo universo. Fue clave en la redacción de los suplementos de Realm of Chaos, donde no solo detalló a los dioses del Caos del juego, sino que también estableció el tono de horror-fantasía que se convertiría en una característica definitoria.
Controversias y cambios en Games Workshop
La gestión de Ansell no estuvo exenta de controversias. Su decisión de cerrar la oficina de Londres y trasladar el negocio a Nottingham, donde se encontraba Citadel, provocó reacciones encontradas. El equipo editorial de la revista White Dwarf, ubicado en Londres en ese momento, expresó su descontento a través de un acróstico oculto en la página de contenidos de la edición número 77, que leía “sod off Bryan Ansell”.
Ansell dejó la empresa en 1991, después de supervisar el auge de la compañía. Posteriormente, se dedicó a dirigir Wargames Foundry, una empresa más pequeña de miniaturas históricas, creada inicialmente para darle a su padre una ocupación tras su jubilación. Ansell se retiró en 2005, y su familia continúa dirigiendo Wargames Foundry.
El legado de un pionero
El legado de Bryan Ansell en el mundo del wargaming y las miniaturas es indiscutible. A través de su trabajo en Citadel y Games Workshop, no solo transformó la forma en que se jugaba y se veía el wargaming, sino que también inspiró a generaciones de jugadores y diseñadores. Su influencia se extiende más allá del universo de las figuras, tocando prácticamente todos los aspectos del hobby de los juegos de mesa.
El fallecimiento de Ansell es un momento triste para la comunidad de juegos de estrategia y miniaturas, pero su legado y su visión continúan viviendo en los mundos que ayudó a crear y en las comunidades que fomentó. Su contribución al mundo del wargaming será recordada siempre como la de un verdadero visionario y pionero.
Este universo que empezo en las mesas va más allá de ser un fenómeno en el mundo de los juegos, ha trascendido a otros medios con éxito. Ha inspirado series de televisión, videojuegos y novelas, expandiendo su universo y alcance. Títulos como “Total War: Warhammer” y “Warhammer 40,000: Dawn of War” son ejemplos destacados de su adaptación a videojuegos, llevando la experiencia del wargaming a una audiencia digital más amplia. Estas adaptaciones han contribuido a solidificar aún más el legado de este universo en la cultura popular.