Ben Affleck recuerda su papel como Daredevil y aplaude el mayor acierto del MCU

Ben Affleck reflexiona sobre su época como superhéroe y señala el detalle que transformó a Marvel en un éxito imparable

Ben Affleck ha vivido en sus propias carnes la evolución del cine de superhéroes. Antes de ser el Batman del universo de DC, se enfundó el traje rojo de Daredevil en 2003, en una época en la que este tipo de películas todavía buscaban su identidad. Ahora, mientras rueda The Accountant 2 junto a Jon Bernthal, el Punisher oficial del MCU, Affleck ha aprovechado para hacer balance de aquellos días caóticos y de cómo Marvel encontró la fórmula ganadora.

Equilibrio perfecto entre seriedad y humor

En una entrevista reciente con Jake Hamilton, tanto Affleck como Bernthal hablaron sobre sus experiencias encarnando a icónicos personajes de cómic. Fue entonces cuando Affleck lanzó una reflexión que ha hecho que muchos fans se paren a pensar: el verdadero éxito del MCU no está solo en su universo compartido, sino en algo mucho más sutil: el tono.

Durante la charla, Affleck elogió a Bernthal como Punisher y recordó su etapa como Daredevil, dejando claro que las cosas eran muy diferentes antes de que Kevin Feige tomase el control de Marvel Studios.

“El Punisher de Jon es muy bueno. Daredevil fue una historia interesante, pero ocurrió antes de que Kevin Feige se hiciera cargo de Marvel. Él impuso una claridad de tono en las películas, y resolvió lo más complicado: ¿cómo equilibrar una historia donde hay gente en pijama con superpoderes? ¿Cuánta seriedad, cuánto humor, cuánta complicidad con el público debe haber? ¿Cómo debe ser la acción?”, explicó Affleck.

Según el actor, el avance de los efectos visuales también fue un factor clave: “Coincidió con que los efectos especiales empezaron a ser realmente convincentes, lo que permitió que actores de verdad pudieran hacer creíbles esos mundos tan locos”. Aunque confesó que todavía no ha visto al nuevo Daredevil, dejó claro su cariño por el personaje: “Le deseo lo mejor, pero yo no me metería con su Punisher“.

Ben Affleck y el caos de los primeros superhéroes en el cine

Antes de que existiera el MCU tal como lo conocemos, las películas de superhéroes parecían hechas cada una en su propio universo. Un filme podía ser oscuro y depresivo como The Punisher, mientras que otro, como Daredevil, parecía un culebrón de neón.

No había una línea clara que uniera las historias, algo que hoy damos por sentado gracias a Marvel. Como señala Affleck, la magia no fue solo unir a todos los personajes, sino hacer que, aunque saltaras de Iron Man a los Guardianes de la Galaxia, sintieras que todo formaba parte de un mismo mundo.

Sin embargo, esta coherencia también tiene un precio. Muchos fans señalan que algunas películas actuales del MCU empiezan a parecerse demasiado entre sí, como si siguieran una receta preestablecida. La frescura de los primeros tiempos a veces se echa de menos, aunque el éxito y la estabilidad que ha traído este enfoque son incuestionables.

Un pequeño homenaje a un superhéroe adelantado a su tiempo

Aunque el Daredevil de Affleck no fue un éxito rotundo, escucharlo hablar del género deja claro que entiende perfectamente sus claves. Su amor y respeto por los superhéroes no ha cambiado, a pesar de que le tocó vivir una época en la que todavía se estaban haciendo experimentos.

Quizá en otro momento, con la maquinaria actual de Marvel, su versión de Matt Murdock habría tenido otra suerte. Pero lo que nadie puede negar es que Affleck fue uno de los que ayudó a allanar el camino, aunque fuera a base de tropezones.

Hoy, en pleno 2025, cuando ver a Daredevil y Punisher compartiendo pantalla parece algo natural, es interesante recordar que, hace no tanto, habría parecido un cruce de locura total. Y todo gracias a esa “claridad de tono” de la que habla Affleck, la misma que Kevin Feige convirtió en el auténtico superpoder del MCU.