“Me influenciaron los efectos especiales. Traté de fusionar elementos como monstruos gigantes, robots, perros voladores y otros superhéroes,” comentó Gunn, dejando entrever que Superman no será precisamente un drama intimista en el campo de maíz de los Kent.
Superman y Godzilla, más parecidos de lo que crees
Ese drama humano, que en Godzilla Minus One giraba en torno a la culpa, el trauma y la redención en la posguerra japonesa, parece que tendrá su eco en Superman, quien en palabras del propio Gunn será retratado “con bondad, compasión y una actitud que valora la vida humana.” Pero aquí viene el matiz que podría darle al personaje un aire renovado y más actual.
Y es que si algo ha quedado claro con esta nueva etapa de DC Studios bajo la batuta de Gunn y Peter Safran, es que el enfoque será más autoral, más emocional y más equilibrado entre lo grandioso y lo íntimo. Como hizo Marvel con Iron Man o Black Panther, parece que DC quiere dar con una mezcla que conecte con el espectador sin renunciar al espectáculo.
Un Superman con raíces nuevas, pero alma de siempre
Además, su elección de David Corenswet como el nuevo Clark Kent apunta a un enfoque fresco, con un actor que puede transmitir cercanía sin perder la majestuosidad del personaje. Gunn quiere que veamos a Superman no como un dios inalcanzable, sino como alguien que, pese a su poder, elige hacer el bien cuando nadie más lo hace, y esa es la verdadera fuerza del héroe más grande de DC.
Un nuevo Superman con sabor a clásico y corazón moderno
El tráiler, ya publicado, nos deja ver que ese kaiju al que hace referencia Gunn no será solo un guiño estético. Habrá destrucción a gran escala y, probablemente, combates épicos. Pero lo que más destaca es esa combinación de épica, sensibilidad y crítica al mundo actual, una mezcla que recuerda justo al enfoque de Godzilla Minus One, donde el verdadero monstruo era la indiferencia humana.