La compra de Netflix por Warner Bros. Discovery incluye HBO Max y podría cambiar por completo el futuro del cine y el streaming
En un giro que podría sacudir los cimientos de la industria audiovisual, Netflix ha ganado la puja por Warner Bros. Discovery y ha iniciado negociaciones exclusivas para cerrar la adquisición. La oferta, casi completamente en efectivo, fue lo suficientemente jugosa como para dejar fuera de juego a otros competidores como Paramount, que no lograron superar los 28 dólares por acción ofrecidos por el gigante del streaming.
Bloomberg fue el primero en lanzar la exclusiva, rápidamente respaldada por medios como The Hollywood Reporter y Variety. En el acuerdo estarían incluidos el estudio cinematográfico de Warner, su división televisiva y la plataforma HBO Max, una de las más valoradas en cuanto a catálogo se refiere. La operación podría cerrarse en cuestión de días, aunque todavía debe superar varios filtros regulatorios.
Netflix compra Warner Bros. Discovery
Antes de dar el paso final, Warner se separará de sus redes de cable tradicionales como TNT, TBS y CNN, que pasarán a formar parte de una nueva entidad llamada Discovery Global. Esta escisión está prevista para completarse a mediados de 2026, dejando el camino libre para que Netflix se quede con la joya de la corona: los contenidos.
Pero no todo está cerrado. Si los reguladores tumban el acuerdo, Netflix ha ofrecido una indemnización de 5.000 millones de dólares, lo que deja claro hasta qué punto está dispuesta a apostar fuerte por este movimiento.
El impacto de esta posible fusión es enorme. No estamos hablando solo de una compra más: sería la absorción de una de las majors históricas de Hollywood por una plataforma digital. Un cambio de paradigma que transforma cómo se produce, distribuye y consume el entretenimiento en todo el mundo.
La batalla por Warner fue larga y llena de drama. Paramount, uno de los grandes interesados, llegó a elevar su oferta hasta los 27 dólares por acción gracias al respaldo económico de varios inversores de Oriente Medio. Aun así, no fue suficiente para frenar el impulso de Netflix, que parecía tener la delantera desde el principio del proceso, según fuentes cercanas a la negociación.
La lucha por la distribución en salas
El malestar no tardó en llegar. Según Variety, un grupo anónimo de productores de cine de alto perfil ha enviado una carta al Congreso de EE. UU. expresando su preocupación por las consecuencias de esta fusión. Aseguran que podría ser “destructiva para la distribución en salas”, y piden que se investigue el acuerdo bajo los máximos estándares antimonopolio.
Uno de los temas más controvertidos es el de la ventana de exclusividad en cines. Algunas fuentes aseguran que Netflix quiere reducirla a solo dos semanas, lo que supondría un golpe durísimo para las salas tradicionales. Aunque otras voces dentro de la negociación aseguran que las ventanas serían más largas, lo cierto es que el debate ya está sobre la mesa.

Si finalmente se aprueba esta megafusión, el panorama del streaming cambiará por completo. Netflix no solo consolidaría su dominio como plataforma, sino que pasaría a controlar franquicias legendarias como DC, Harry Potter o Juego de Tronos. Esto le permitiría crear un ecosistema cerrado de producción y distribución sin depender de terceros, un movimiento estratégico que pone contra las cuerdas a competidores como Disney+ o Amazon Prime Video.
El futuro del DCU
En cuanto al futuro del DC Universe, la cosa se complica. Con Netflix al mando, el plan de James Gunn y Peter Safran podría tambalearse, especialmente si los nuevos dueños deciden redirigir el rumbo creativo o imponer sus propias condiciones de producción. Aunque la actual hoja de ruta del DCU apunta a un relanzamiento cohesionado y ambicioso, con películas como Superman en camino, la entrada de Netflix podría cambiar las reglas del juego por completo.
¿Se mantendrá la visión actual o asistiremos a una nueva reestructuración de personajes y tramas? Todo dependerá del tipo de control creativo que Netflix quiera ejercer sobre las franquicias adquiridas. Si decide dejar libertad a los responsables actuales, puede que el proyecto siga adelante tal cual. Pero si impone su fórmula basada en consumo rápido y exclusividad digital, podríamos estar ante una nueva era para DC, más centrada en el streaming que en el cine.


