El capítulo final ha dividido por completo a la comunidad de fans y nadie se queda callado
The Last of Us no es una serie que pase desapercibida, pero con su final de la segunda temporada ha dado un golpe sobre la mesa que ha dejado a muchos con el corazón encogido… y a otros, directamente enfadados. Las redes sociales, especialmente X (el antiguo Twitter), están ardiendo tras la emisión del episodio que cierra esta nueva etapa del viaje de Ellie.
Mientras una parte del fandom defiende las decisiones narrativas tomadas por los showrunners Craig Mazin y Neil Druckmann, otra no se corta en llamar al capítulo final “una traición” o incluso “un insulto para los fans de toda la vida”. ¿Por qué tanta polémica? Vamos por partes.
El final más divisivo hasta ahora
Desde su estreno en 2023, The Last of Us ha sido una de las series más seguidas y discutidas del panorama televisivo. Adaptación de los célebres videojuegos de Naughty Dog, la historia sigue a Joel y Ellie, dos supervivientes de un mundo posapocalíptico arrasado por un hongo mortal que convierte a los humanos en criaturas violentas y deformes.
La primera temporada fue casi unánimemente aclamada, pero con esta segunda entrega, las aguas están mucho más revueltas. El capítulo final ha cambiado el tono, ha profundizado en personajes controvertidos y ha puesto sobre la mesa decisiones que rompen con las expectativas del público general… y eso siempre genera grietas.
Kaitlyn Dever entra con fuerza como Abby
Uno de los mayores puntos de fricción en esta segunda temporada ha sido la presentación anticipada de Abby, interpretada por Kaitlyn Dever. En el videojuego original The Last of Us Part II, los jugadores tardaban varias horas en entender el peso emocional del personaje. Pero aquí, la serie ha optado por mostrar sus motivaciones desde el principio.
Según Druckmann, “cuando juegas, desarrollas empatía por el simple hecho de controlar al personaje. En una serie, no contamos con eso, así que debemos construirla de otras formas”. Esto ha hecho que muchos espectadores sintieran que la narrativa estaba forzando la simpatía hacia Abby… justo cuando aún no han superado sus actos.
Y es que Abby llega con un objetivo claro: vengar la muerte de su padre a manos de Joel, una escena que ya dejó a más de uno temblando a mitad de temporada. Lo que parecía una historia de redención se convierte en una espiral de consecuencias brutales.
Un casting con historia detrás
Kaitlyn Dever no es una recién llegada al universo de Naughty Dog. De hecho, la actriz confesó que estuvo muy cerca de interpretar a Ellie en el primer videojuego. “Me reuní con Neil hace años para el papel”, explicó recientemente, aunque al final fue Ashley Johnson quien dio vida a Ellie en los juegos. Años después, Dever volvería al estudio para hacer captura de movimiento en Uncharted 4, una anécdota que ahora cobra más sentido.
Esta conexión personal con el material original ha hecho que muchos fans de la saga vean en Dever una intérprete adecuada para dar profundidad a Abby, aunque no todos están convencidos aún. En cualquier caso, su interpretación ha sido uno de los aspectos más elogiados del episodio final.
Nuevos y viejos rostros para un nuevo mundo
Además del regreso de Bella Ramsey como una Ellie más endurecida y sombría, la temporada ha contado con Gabriel Luna retomando su papel de Tommy, el hermano de Joel. Su personaje representa una visión menos violenta del mundo post-colapso, aunque la serie no deja de enfrentarlo a dilemas morales cada vez más complicados.
La tensión narrativa ha ido creciendo episodio a episodio, pero no todos los espectadores están satisfechos con el ritmo o la evolución de los protagonistas. Algunos sienten que Ellie se ha desdibujado, que su viaje ya no es tan claro como en la primera temporada, y que los guionistas están más centrados en preparar el terreno para futuros conflictos que en cerrar tramas abiertas.
¿Qué nos espera en la temporada 3?
Con HBO confirmando que habrá una tercera temporada, queda la duda de cómo se desarrollarán los eventos del segundo videojuego, que ya de por sí estaba dividido entre dos puntos de vista muy diferentes. ¿Optará la serie por seguir ese mismo esquema? ¿Dará aún más protagonismo a Abby?
Por ahora, lo que es seguro es que The Last of Us ha dejado claro que no tiene miedo de arriesgar, aunque eso implique enfrentarse a una parte de su audiencia. La fidelidad al juego sigue presente, pero cada capítulo demuestra que están dispuestos a reinterpretar para que el formato televisivo funcione con sus propias reglas.
