El nuevo crossover de DC arranca con una muerte inesperada dejando a Batman fuera y cambiando todas las reglas del juego
El torneo definitivo del Universo DC
El problema es que el precio de participar es altísimo: cuanto más te acercas al Corazón de Apokolips, más te corrompe. Y en esa oscuridad, ni siquiera Batman puede sobrevivir.
El caballero oscuro muere… y el Joker ocupa su lugar
El número arranca con una escena devastadora: Batman, Superman y Wonder Woman caen en combate, solo para ser resucitados gracias al poder del Quantum Quorum, una entidad que manipula el tiempo. Pero la tregua dura poco. Al prepararse para el torneo, Batman vuelve a caer, esta vez de forma irreversible.
¿El asesino? Nada menos que el Joker, quien aparece blandiendo una bandera que se clava en el pecho del héroe. La imagen recuerda inevitablemente a Infinity War, pero aquí el golpe emocional lo da la relación directa entre ambos personajes. Que el Joker sea quien elimine a Batman antes del torneo no solo lo deja fuera de la contienda, sino que convierte al payaso del crimen en uno de los nuevos contendientes del evento.
Esto abre la puerta a un enfrentamiento que promete ser legendario: Red Hood contra el Joker, ahora cargado de una carga emocional brutal.
La otra cara del evento
Con esta jugada, DC consigue mantener la atención en dos frentes: el caos cósmico del torneo y el vacío moral que deja la caída del Murciélago.
¿Qué podemos esperar del torneo?
El concepto detrás de DC K.O. es tan simple como potente: una batalla entre los héroes y villanos más poderosos del universo DC para decidir quién enfrentará a Darkseid. Pero el giro corruptor del Corazón de Apokolips asegura que nadie saldrá indemne. Snyder juega con la idea de que el poder absoluto transforma incluso a los más nobles, y esa premisa promete momentos de traición, locura y sacrificio.
Scott Snyder regresa al gran evento
Con DC K.O., Snyder vuelve a las historias corales y épicas que definieron su etapa en Dark Nights: Metal. Pero aquí el tono es más desesperado, más físico, casi como un torneo de artes marciales mezclado con mitología cósmica.
El dibujo de Javier Fernández, con su trazo agresivo y energía cinética, aporta una sensación de inmediatez y brutalidad que encaja perfectamente con la propuesta. Cada viñeta respira acción y peligro, recordando que este evento no es uno más, sino un punto de inflexión para el Universo DC.
Un futuro incierto para el Caballero Oscuro
Además, esta decisión narrativa puede ser el inicio de una nueva era de legado, donde personajes como Red Hood, Nightwing o incluso Damian Wayne tengan que asumir papeles más centrales.
Sea como sea, DC K.O. ha arrancado con fuerza: una muerte icónica, un torneo brutal y el regreso de Darkseid en plena forma. Snyder y Fernández han puesto las cartas sobre la mesa, y el mensaje está claro: en este evento, nadie está a salvo.


